El Congreso aprobó la primera respuesta legislativa al ataque al Capitolio del 6 de enero
El proyecto de ley general de presupuesto aprobado por el Congreso incluye una reescritura de una ley electoral federal de 1887 y cierra lagunas que el expresidente Donald Trump y su equipo intentaron explotar el 6 de enero de 2021
El Congreso aprobó el viernes el proyecto de presupuesto federal, y dentro de la ley que financiará al gobierno hay una medida destinada a dificultar la revocación de una elección presidencial certificada, lo que marca la primera respuesta legislativa al ataque contra el Capitolio de EE.UU. del 6 de enero de 2021 y la incesante campaña de presión del entonces presidente Donald Trump para permanecer en el poder a pesar perder las elecciones en 2020, según CNN.
La legislación, que revisaría la Ley de Conteo Electoral de 1887, se incluyó como parte del enorme proyecto de ley de presupuesto federal de $1.7 billones de dólares que el Senado aprobó el jueves y la Cámara aprobó el viernes. Ahora irá al presidente Joe Biden para que se convierta en ley.
La medida para reformar la Ley de Cómputo Electoral aclararía que el papel del vicepresidente en la supervisión de la certificación del resultado electoral en el Congreso es estrictamente ceremonial. Elevaría el umbral para que sea más difícil para los legisladores forzar votos que intenten anular el resultado certificado de un estado. Además, incluye disposiciones que evitarían esfuerzos para pasar electores falsos al Congreso.
Cuál es la ley electoral modificada
La Ley de Conteo Electoral es una ley de 1887 que Donald Trump trató de explotar creando confusión sobre cómo el Congreso cuenta los votos del Colegio Electoral de cada estado en una elección presidencial.
Los expertos constitucionales dicen que el vicepresidente actualmente no puede ignorar un resultado electoral certificado por el estado, pero Trump presionó al entonces vicepresidente Mike Pence para que obstruyera la certificación del Colegio Electoral en el Congreso como parte de su campaña de presión. Pence se negó a hacerlo y, como resultado, se convirtió en el objetivo del expresidente y su multitud de seguidores que irrumpieron en el Capitolio el 6 de enero.
La nueva legislación busca dejar en claro que el vicepresidente solo tiene un papel ceremonial en la supervisión de la certificación de los resultados electorales, y no tiene el poder de aceptar, rechazar o resolver disputas sobre los electores de manera unilateral.
También haría más difícil que los miembros del Congreso intenten anular una elección aumentando el umbral de la cantidad de miembros de la Cámara y el Senado necesarios para presentar una objeción a los resultados de las elecciones cuando una sesión conjunta del Congreso se reúne para certificarlos, según se explica en una hoja informativa.
El proyecto de ley también incluye cambios destinados a evitar los esfuerzos para instalar electores falsos. Por ejemplo, el gobernador de cada estado sería responsable de la presentación de un certificado que identifique a los electores.