Compartiendo la tradición de la rosca de reyes por generaciones
Sin importar la distancia, nuevas generaciones latinas continúan celebrando el Día de los Reyes Magos con su tradicional rosca de reyes
El jueves por la mañana Frida Noriega llegó al área de panadería de su supermercado local en el sur de Los Ángeles para tomar su tradicional rosca de reyes.
Noriega, quien iba acompañada de sus hijos de 2 y 1 año, dijo que esa rosca era para comer ese día y este viernes comprarían otra para celebrar oficialmente el Día de los Reyes Magos.
La millenial aseguró que en casa disfrutan degustar la rosca y como solo es por una temporada corta la compran más de una vez. Ahora como madre de tres niños dijo que le gustaría compartir la tradición de la rosca con ellos.
“Yo nací aquí pero mis papás son de Sinaloa [México] y desde que yo era chica siempre compraban la rosca”, dijo Noriega. “Siempre nos gusta ver quien se gana el monito y tiene que hacer tamales”.
En su familia ella no cree que la tradición muera ya que están muy arraigados a su cultura y orgullosamente la comparten con las generaciones más jóvenes.
Al supermercado Northgate González también llegó Alma Cruz acompañada de su hija Itzel Rivera, de 19 años, quien inmediatamente caminó hacia las roscas y tomó una.
Cruz, quien tiene cuatro hijos adultos y un nieto, dijo que se siente muy contenta de ver que esta tradición que ella trajo de su natal Colima, México continúa en su familia ahora hasta con los más pequeñitos.
Por su parte Rivera dijo que es muy agradable compartir tiempo en familia y la rosca de reyes es una buena excusa para hacerlo. En lo particular dijo que no le gusta sacar el muñequito blanco, el cual representa al niño Diós, en su rebanada de rosca pero si es muy gracioso ver la cara del que se lo gana.
De acuerdo a la tradición, quien lo gana es el que hace tamales para el Día de la Candelaria el 2 de febrero.
En el supermercado también estaban comprando Jonathan de 23 años y Andrea de 18 años. Ambos son centroamericanos y dijeron que no celebran el Día de Reyes ni compran la rosca porque no es muy tradicional en sus países.
“Es como algo de religión pero no todos lo celebran”, dijo Jonathan. “Pero para mí es como cualquier pan”.
Y a poca distancia la señora Isabel Carmona escogía una rosca grande y estaba indecisa si llevar una pequeña o no. Contó que la grande es para llevarla a un grupo de niños de Tijuana, México. Pero debido a que no iba a estar en casa este 6 de enero estaba considerando dejar una a sus hijos adultos para que la compartan con sus nietos.
“Pues en la casa yo soy la que anda trayendo la tradición, esta es la primera vez que voy a estar fuera de casa para la celebración”, dijo Carmona.
Explicó que para ella es muy bonito compartir la rosca con el café o el chocolate caliente y así hablar de las tradiciones que continúan pese a estar en otro país.
Miles de roscas para vender
En el supermercado Northgate González la tradición ha ido aumentando en los últimos años. Salvador Pérez, supervisor de la panadería dijo que para él esta es una agradable fecha ya que le recuerda a su niñez.
“Yo vengo celebrando la tradición desde niño con mi familia y me gusta porque llevamos la convivencia y luego la alegría de ver qué nos iban a traer los reyes magos”, dijo Pérez.
Indicó que una vez que tuvo a sus dos hijos, ambos nacidos en Estados Unidos, él también comenzó a compartir la tradición de la rosca y de los reyes magos.
Pérez estimó que por temporada en ese supermercado en específico se venden casi 4,000 roscas de reyes.
Tradición de generaciones
El párroco de la Iglesia San Patricio de North Hollywood, Nicolas Sánchez, dijo que ha notado que en su comunidad la primera y segunda generación es más apegada a las tradiciones incluyendo la rosca de reyes y los reyes magos.
“La tercera no lo aseguraría tanto, lo notamos en las fiestas que son la Epifanía y la Candelaria”, dijo el párroco. “Como en el Dia de la Candelaria hay bastante gente que trae a su niño Dios para que lo bendigan y si se va manteniendo la tradición y llevan a sus hijos”
Sin embargo, agregó que posiblemente los que ya hayan nacido aquí no llevan tanto a sus hijos.
“Como que se van alejando a pesar de que lo han vivido de pequeños en sus casas”, dijo el párroco.
Cuando se trata de la rosca de reyes, el párroco Sánchez dijo que siempre que se trata de comercializar algo es bueno pero también es agradable conocer su historia.
Sánchez explicó que la rosca está recordando cuando los reyes magos de oriente fueron a adorar al niño Jesús. La rosca simboliza la corona de los reyes con frutas caramelizadas en representación de los diamantes así como los dones de la gracia de Dios que es multicolor. La redondez de la rosca también representa el amor infinito de Dios.
En la rosca se esconde uno o varios niños. Estos representan como María y José tuvieron que esconder al niño Jesús para que el rey Herodes no lo matara.
“El cuchillo viene como una amenaza de Herodes y al partir la rosca al que le cae el niño tiene que después ser el anfitrión de la fiesta repartiendo los tamales y el atole como una forma de pagar las consecuencias”, explicó el sacerdote.
Esta fiesta es el 2 de febrero o el Día de la Candelaria la cual es una forma de continuar uniendo a las familias en tradiciones por generaciones.