Los republicanos en la Cámara de Representantes votan para restringir el derecho al aborto
La Cámara de Representantes de mayoría republicana aprobó el primer proyecto de ley contra el aborto después de la decisión de Roe vs Wade
Los legisladores republicanos de la Cámara de Representantes utilizaron el miércoles su nueva mayoría para impulsar un proyecto de ley para proteger al “nacido vivo”, en una de las primeras votaciones que realizan en el nuevo Congreso y que muestra su anunciada intención de restringir el derecho al aborto en Estados Unidos, después de la decisión de la Corte Suprema que derogó la protección de ese derecho en el caso Roe vs Wade.
La medida en gran parte simbólica requeriría que los proveedores de atención médica brinden atención a los bebés nacidos después de un intento de aborto.
Los proveedores de salud ya están obligados por ley a actuar para brindar servicios médicos a cualquier bebé nacido a cualquier edad gestacional. El proyecto de ley de la Cámara también penaliza el “asesinato intencional de un niño nacido vivo”, una conducta que es ilegal en Estados Unidos.
La Ley de Protección de Infantes Nacidos Vivos, promulgada en 2002, dice que cualquier niño nacido en cualquier etapa de desarrollo, incluso después de un aborto potencial, debe ser considerado una “persona” y un “ser humano”, y por lo tanto tiene derecho a las mismas protecciones legales.
La medida, que fue aprobada 220-210, prácticamente no tiene posibilidades de ser aprobada por el Senado controlado por los demócratas. El representante Henry Cuellar, el único demócrata de la Cámara que no apoya el derecho al aborto, votó a favor del proyecto de ley.
El hecho de que los republicanos hayan elegido esta ley como una de las primeras en votar en este 118 Congreso, es una muestra de que la lucha contra el derecho al aborto y la defensa a la vida será una de sus prioridades en los últimos dos años del gobierno de Joe Biden.
El Colegio Estadounidense de Obstetras y Ginecólogos dice que estas medidas toman decisiones fuera de las manos de los médicos, lo que obliga a los médicos a “administrar intervenciones incluso cuando no hay posibilidad de supervivencia”.
En opinión de Planned Parenthood, la mayor red de clínicas de servicios reproductivos de EE.UU., el proyecto de ley es “deliberadamente engañoso y ofensivo para las personas embarazadas, y médicos y enfermeros que brindan su atención” y una táctica más de generar “miedo artificial”, utilizada para estigmatizar el aborto, opinó en un comunicado Jacqueline Ayers, vicepresidenta del departamento de política y campañas de la organización.
Es, añadió Ayers, “otro intento más de los políticos antiabortistas de difundir información errónea como un medio para lograr su retorcido objetivo: prohibir el aborto seguro y legal”.
Las leyes existentes ya requieren que los médicos provean atención médica adecuada así que este “engañoso” proyecto crea “un problema que no existe”, agregó Ayers.
La segunda medida aprobada hoy en la Cámara de Representantes condena los ataques “contra instalaciones, grupos e iglesias pro-vida, o sea, que restringen o prohíben el derecho al aborto, que no tiene ningún peso legal.
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