Inmigrantes indocumentados se quejan de recibir mala comida en refugios de Nueva York
Inmigrantes indocumentados se quejan de recibir mala comida en los refugios de Nueva York, donde se menciona que se destinan menos de $4 dólares para que las personas reciban tres alimentos por día
Un gran número Inmigrantes indocumentados que permanecen en los refugios instalados por las autoridades de Nueva York o bien en los hoteles donde les bridan un techo, se quejan de la mala calidad de la alimentación recibida de manera gratuita.
Por su parte, el alcalde Eric Adams reitera que su administración está haciendo su mejor esfuerzo por ofrecerles a las personas una comida sana y hasta balanceada, aunque ello les implique destinar millones de dólares.
Desde el año pasado, la ciudad les está dando cobijo a miles de indocumentados enviados en autobús desde la frontera sur e incluso desde Miami.
Ello implica destinar millones de dólares en recursos para pagarles a varios hoteles de tal manera que nadie se quede sin techo. No obstante, lejos de solucionarse el problema, este parece aumentar día a día, pues no dejan de arribar nuevos inmigrantes a la “Urbe de Hierro”.
La controversia sobre la alimentación surge sobre todo de madres de familia quienes se quejan de la mala calidad de la comida.
“A veces la comida huele mal. Está podrida. Y cada vez que los niños comen, es como si tuvieran una intoxicación alimentaria”, señaló Diana, madre de dos hijos y quien, después de varios días de estar hospedada en un hotel habilitado como refugio, accedió a una entrevista con la cadena Telemundo.
Por su parte, Rosalina, quien fue colocada en otro refugio, sostiene que debido a los alimentos proporcionados el gobierno, uno de sus hijos ya se enfermó.
Mientras tanto, el pediatra Kendall Rao, quien atiende a varios niños en los refugios temporales, emitió un comunicado alertando sobre problemas gastrointestinales que están apareciendo.
“Entre los pacientes pediátricos que buscan asilo que he estado viendo, ha habido un aumento en la cantidad de niños que informan problemas gastrointestinales, como falta de apetito, náuseas, vómitos, diarrea y estreñimiento. Muchos de estos niños pequeños parecen estar teniendo dificultades para adaptarse a la comida. Parece estar causando un shock en sus sistemas digestivos en desarrollo”, indica la misiva.
En este sentido, Julie Won, concejal de la ciudad y quien preside el Comité de Contratos, dio a conocer que a varios de los hoteles se les está pagando menos de $4 dólares para que las personas a la cuales albergan reciban tres raciones de alimento al día.
“¿Puedes imaginar lo que eso significa? Si son $3.44 dólares por tres comidas, ¿qué significa eso por plato? ¿Cuesta $1 dólar y algo de centavos? ¿Puedes imaginar cuáles deben ser los comestibles para crear esa comida? ¿Qué estás comiendo? ¿Qué le estás dando de comer a la gente?”, cuestionó recientemente ante varios de comunicación al tiempo de advertir que se planea realizar una audiencia sobre el tema.
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