Médicos estadounidenses preocupados por disminución en las tasas de vacunación infantil

Un nuevo informe de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), reveló que las tasas de vacunación infantil han disminuido por tercer año consecutivo en Estados Unidos.

El documento encontró que el 93 % de los niños de jardín de infantes recibieron las vacunas requeridas por el Estado durante el año escolar 2021-2022, una caída de dos puntos porcentuales con respecto al año escolar 2019-2020.

Además, durante el año escolar 2020-2021, el 94 % de los niños de kindergarten recibieron las vacunas requeridas, lo que muestra una tendencia gradual a la baja en las vacunas infantiles de rutina.

Los datos revelan que en general, el 2.6 % de los niños tenían una exención para las vacunas el año pasado, y la cobertura de vacunación para el antídoto contra el sarampión, las paperas y la rubéola (MMR) es la más baja en una década.

La cobertura con las vacunas contra la difteria, el tétanos y la tos ferina acelular (DTaP), la poliomielitis y la varicela también disminuyó en la mayoría de los estados.

La Dra. Danelle Fisher, presidenta de pediatría del Centro de Salud Providence Saint John’s de California dijo a Yahoo Life que se ha recorrido un largo camino con las vacunas infantiles, y ahora la gente tiene miedo a las vacunas que se está despertando.

Resistencia a las vacunas por desinformación

Por su parte, el Dr. Juan Salazar, médico jefe de Connecticut Children’s, comentó al mismo medio que estas son “realmente malas noticias” y “muy preocupantes”.

Los expertos afirman que durante el primer año de la pandemia, las consultas de cuidado infantil se redujeron drásticamente, lo que inició esta tendencia a la baja en las tasas de inmunización.

Al mismo tiempo, la pandemia se politizó y alentó “un aumento simultáneo en el cuestionamiento de las políticas de salud pública y la desconfianza en las decisiones gubernamentales, lo que llevó a un aumento del sentimiento antivacunas”, señaló el Dr. Michael Bauer, pediatra y director médico del Northwestern Medicine Lake Forest Hospital.

Aparentemente ese “ruido” contra la vacunación ha disuadido a los padres no solo de evitar las vacunas contra el COVID, sino también de otras vacunas.

Junto con la desconfianza, Bauer observa “un aumento en el número de estados que promulgan leyes que permiten a los padres negarse a vacunar a sus hijos más allá de las razones médicas”. Agrega que “los estados que tienen las leyes más estrictas tienen las tasas más altas de cumplimiento de las vacunas”.

Tanto los niños no vacunados como quienes los rodean pueden estar en riesgo de enfermarse, con esta baja en las tasas de vacunación infantil.

Te puede interesar:
Mal aliento: cómo los alimentos fermentados son ideales para combatir el mal aliento
Ayuno intermitente podría no afectar la pérdida de peso, afirma un estudio