Enorme tiburón blanco detectado cerca de la costa de Florida preocupa a las autoridades
El escualo de 11 pies de largo conocido como “Maple” lleva al menos dos años aproximándose a la costa de la zona
La primera ocasión en que se tuvieron noticias de “Maple” fue 2001, cuando fue descubierta en Nueva Escocia, Canadá, pero ahora se le ubica al sureste de St. George Island. Crédito: Dan Kitwood | Getty Images
De cara al próximo periodo vacacional, las autoridades de Florida realizan un monitoreo de un enorme gran tiburón blanco de 11 pies de largo y 1,200 libras que lleva al menos dos años surcando la costa y podría llegar a poner en riesgo a los visitantes que acuden a la playa.
De acuerdo con información dada a conocer por Global Shark Tracker de OCEARCH una hembra depredadora a la cual llaman “Maple” fue vista el lunes por la mañana al sureste de St. George Island, Florida, en el Golfo de México.
El peligroso ejemplar puede ser identificado debido a que tiene una herida distintiva en su costado izquierdo, la cual se le atribuye a otro escualo probablemente mayor.
OCEARCH es una organización que se ha dado a la tarea de investigar a los gigantes del océano con el objetivo de obtener datos que permitan entender su comportamiento y con ello tratar de salvaguardar el equilibrio de esta especie que es muy utilizada en Asia para el consumo humano.
Con respecto al ejemplar denominado “Maple”, lleva rastreándolo desde septiembre de 2001 cuando la detectó por primera vez en la costa de Nueva Escocia, Canadá, y por ello le asignó dicho nombre.
Mediante un mapa virtual, OCEARCH muestra que cerca de la costa de Florida al menos 32 escualos de diferentes especies aguardan pacientemente para cazar alguna presa.
Por esta razón, las autoridades también vigilan que los escualos no se aproximen a la orilla de las playas.
De hecho, recientemente Fox News dio a conocer que un pescador profesional de tiburones capturó a un gran escualo blanco en Pensacola Beach, en el condado de Escambia.
“Sabía que esto era aún más grande que cualquier cosa que hubiera visto antes”, señaló en entrevista el caza tiburones John McLean.
Después de comprobar el tamaño del escualo y tomarle algunas fotografías, el pescador volvió a liberarlo en espera de que se adentre en el mar y no sorprenda a un despistado nadador.
Y es que cada año decenas de personas acostumbradas a adentrarse en el mar sufren ataques por parte de estos feroces tiburones.
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