Mascotas podrían trasmitir enfermedades resistentes a los antibióticos a sus dueños, según una nueva investigación
Hasta ahora, el estudio no puede probar que el contacto cercano con mascotas provoque la resistencia, pero solo sugiere la posibilidad de transporte conjunto
Una nueva investigación afirma que perros y gatos sanos podrían estar transmitiendo organismos multirresistentes (MDRO, bacterias que resisten el tratamiento con más de un antibiótico) a sus dueños hospitalizados.
Del mismo modo, el estudio sugiere que los humanos podrían estar transmitiendo estos microbios peligrosos a sus mascotas.
Los hallazgos se presentarán en el Congreso Europeo de Microbiología Clínica y Enfermedades Infecciosas (ECCMID) de este año en Copenhague, Dinamarca, desarrollado desde el 15 al 18 de abril.
El estudio de más de 2,800 pacientes hospitalizados y sus animales de compañía es realizado por la Dra. Carolin Hackmann del Hospital Universitario Charité de Berlín, Alemania, y sus colegas.
“Nuestros hallazgos verifican que es posible compartir organismos multirresistentes entre los animales de compañía y sus dueños”, dice la Dra. Hackmann.
Sin embargo, destaca que identificaron solo un puñado de casos que sugieren que ni el gato ni el perro son un factor de riesgo importante para la colonización de organismos multirresistentes en pacientes hospitalizados.
Las mascotas pueden ser un almacén de ciertos microbios
La resistencia a los antimicrobianos ocurre cuando los microbios que causan infecciones (como bacterias, virus u hongos) evolucionan para volverse resistentes al medicamento diseñado para matarlos.
Un estudio hecho en 2019 afirma que las infecciones resistentes a los antimicrobianos causaron casi 1,3 millones de muertes y se asociaron con casi 5 millones de muertes en todo el mundo.
En este estudio de control de casos, los investigadores querían averiguar si las mascotas (es decir, gatos y perros) desempeñan un papel en la infección de pacientes hospitalizados con MDRO.
Se centraron en las superbacterias más comunes en los pacientes hospitalizados:
- Staphylococcus aureus, resistente a la meticilina (MRSA).
- Enterococos, resistentes a la vancomicina (VRE).
- Enterobacterales, resistentes a las cefalosporinas de tercera generación (3GCRE).
- Enterobacterales, resistentes a los carbapenémicos (CRE), resistentes a múltiples antibióticos incluyendo penicilina y cefalosporinas.
“Aunque el nivel de intercambio entre los pacientes del hospital y sus mascotas en nuestro estudio es muy bajo, los portadores pueden diseminar bacterias en su entorno durante meses y pueden ser una fuente de infección para otras personas más vulnerables en el hospital, como aquellas con una sistema inmunitario débil y los muy jóvenes o viejos”, dice el Dr. Hackmann.
Este es un estudio observacional y no puede probar que el contacto cercano con mascotas provoque la colonización con MDRO, pero solo sugiere la posibilidad de transporte conjunto, mientras que la dirección de transferencia no está clara.
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