Cómo están tomando los republicanos la acusación contra Trump
Las acusaciones contra el expresidente Donald Trump ha desatado críticas de miembros del Partido Republicano, además de acciones de congresistas de ese partido contra el fiscal Alvin Bragg, a cargo de la indagatoria en Nueva York
Ron DeSantis considera que a Donald Trump le faltó determinación para sacudirse algunos rivales de encima, así como para despedir a ciertos funcionarios. Crédito: Joe Raedle | Getty Images
La acusación que enfrenta Donald Trump y su entrega a la fiscalía de Manhattan el próximo martes han desatado varias reacciones en el Partido Republicano.
Todavía falta que el fiscal Alvin Bragg dé a conocer los 30 cargos que enfrenta Trump por las implicaciones de pagar un soborno a la actriz porno Stormy Daniel, para evitar que hablara sobre una presunta relación sentimental que tuvo con ella antes de las elecciones del 2016.
Una de estas posturas fue la del líder republicano de la Cámara Baja de Estados Unidos, Kevin McCarthy, quien al enterarse del posible arresto de Trump, dijo que este acto sería un “vergonzoso abuso de poder” por parte del fiscal de Manhattan, el demócrata Alvin Bragg.
“Voy a ordenar a los comités relevantes que investiguen inmediatamente si se están usando fondos federales para subvertir nuestra democracia interfiriendo en elecciones con persecuciones motivadas políticamente”, dijo.
“Alvin Bragg está abusando de su cargo para atacar al presidente Trump mientras reduce la mayoría de los delitos graves, incluidos los delitos violentos, a delitos menores. Él tiene diferentes reglas para los opositores políticos. Los republicanos detuvieron la ley criminal radical de DC, e investigaremos cualquier uso de fondos federales que se utilicen para facilitar la perversión de la justicia por parte de los fiscales respaldados por Soros en todo el país.”, señaló el 19 de marzo.
Desde el ala más conservadora de los republicanos también se escuchó el apoyo hacia Donald Trump. En un evento realizado en Carolina del Sur, tras la noticia de la posible detención del expresidente, el senador Lindsey Graham aseguró que se estaban inventando cosas en un intento por destruir la candidatura de Trump.
“El fiscal de Nueva York ha hecho más por ayudarle a ser elegido presidente que cualquier otra persona en Estados Unidos hoy. Se están inventando cosas que nunca han usado contra nadie más. ¿Esto es lo más importante que está pasando en Manhattan? Es un intento para destruirlo a él y a todo lo que le rodea”, afirmó Graham el 18 de marzo.
Otros miembros del Partido Republicano como Marjorie Taylor Greene fijaron sus posturas al señalar que “esto es lo que hacen en países comunistas para destruir a sus opositores políticos”, mientras que el también integrante de la Cámara Baja, Matt Gaetz, apuntó que lo de Donald Trump debe verse como “la patética trama partidista que es”.
El que fuera vicepresidente durante la administración de Trump, Mike Pence, mencionó que como muchos estadounidenses, está “desconcertado” por la noticia de la eventual detención.
“Con una ola gigante de delincuencia en Nueva York y un Partido Republicano que literalmente ha desmantelado el sistema judicial penal en esa ciudad, ¿eso es lo que la Fiscalía de Manhattan considera prioritario?“, cuestionó Pence tras las acusaciones contra Trump.
Pero quien parece estar despreocupado por el posible arresto de Donald Trump es el también Republicano Ron DeSantis, el cual es señalado como uno de los principales rivales del expresidente por la candidatura interna rumbo a la Casa Blanca.
DeSantis, gobernador de Florida, indicó en una conferencia de prensa que no pensaba involucrarse en lo que llamó “un circo fabricado”, además de no pronunciarse sobre lo que haría en caso de que se le pidiera a Florida la extradición de Donald Trump, quien tiene su residencia en Mar-a-Lago.
“No tengo ningún interés en involucrarme en un circo fabricado. No sé lo que implica pagarle dinero a una estrella porno para asegurar el silencio sobre algún tipo de supuesta aventura, pero no puedo hablar de eso”, dijo DeSantis el lunes 20 de marzo.
La investigación a Bragg
Aunque las críticas a Bragg han ido en aumento llamó la atención la investigación que la Cámara de Representantes pretende hacer contra el fiscal.
El representante republicano Jim Jordan (Ohio), el presidente del Poder Judicial de la Cámara de Representantes, aumentó su presión contra Bragg, acusando que estaba utilizando el sistema judicial para persecución política.
El 20 de marzo –antes de revelarse las acusaciones– , Jordan, además del presidente del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes, James Comer, y el presidente del Comité de Administración de la Cámara de Representantes, Bryan Steil, enviaron una carta a Bragg.
“[Se exigen] comunicaciones, documentos y testimonios relacionados con el abuso sin precedentes de Bragg de la autoridad procesal y la posible acusación del expresidente Donald Trump”, dice la carta.
Tras las acusaciones, Jordan aumentó sus críticas y pidió a Bragg una respuesta, pero el fiscal respondió en una amplia carta que no podía revelar información de una investigación en proceso.
La investigación que se lleva a cabo en Manhattan, que lleva casi cinco años, se centra en un presunto pago de $130,000 dólares a Stormy Daniels a cambio de que no se hiciera pública una presunta relación sexual con el entonces candidato a la presidencia durante campaña electoral a la Casa Blanca de 2016.
Según medios estadounidense, la oficina del fiscal Alvin Bragg parece estar centrada en la falsificación de los registros comerciales de la Organización Trump por cómo se incluyó el reembolso de ese pago al exabogado de Trum, Michael Cohen, que dijo haber adelantado ese dinero a la mujer.
Desde que se dio el anuncio de la posibilidad de que Donald Trump fuera arrestado, medios nacionales e internacionales, así como autoridades de Nueva York y fuerzas del orden, se mantienen a la expectativa de lo que podría pasar en las próximas horas con el expresidente de Estados Unidos.
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