Organizaciones de EE.UU. alertan del ataque al misoprostol, la otra alternativa de píldoras abortivas
Tanto la mifepristona como el misoprostol son píldoras abortivas ampliamente utilizadas en EE.UU. para interrumpir el embarazo. Al menos 5 de cada 10 mujeres que buscan un aborto lo hacen con una de estas sustancias
Desde hace días, la píldora abortiva mifepristona ha estado en un terreno legal incierto desde que un juez de Texas dictaminó que la aprobación de la Administración de Drogas y Alimentos de los Estados Unidos (FDA) hace más de dos décadas debería suspenderse.
Después de que el Departamento de Justicia apeló la decisión y solicitó que la Corte Suprema interviniera, el tribunal superior decidió que la mifepristona debería permanecer disponible mientras los tribunales continúan decidiendo su destino legal en un proceso de apelación potencialmente largo.
Sin embargo, expertos aseguran que, con la píldora abortiva en el limbo legal, los especialistas ahora están preocupados por las posibles amenazas para la otra: el misoprostol. El medicamento está aprobado por la FDA para tratar úlceras y, cuando se usa con mifepristona, para inducir el aborto en el primer trimestre del embarazo.
Ante ello, organizaciones defensoras del aborto en Estados Unidos alertaron de un posible ataque a otro tipo de píldoras abortivas, después de que el acceso a la mifepristona se viera amenazado recientemente.
Mini Timmaraju, presidenta de la organización NARAL Pro-Choice America, explicó que, después de “ir detrás de la mifepristona sin éxito”, los extremistas tratarán de atacar al misoprostol: “Tenemos que estar preocupados por eso”, añadió.
Por su parte, la presidenta de Planned Parenthood, Alexis McGill Johnson, también avisó de que “una vez que empiezan con un medicamento y declaran que tienen derecho a quitarlo significa que pueden venir a por cualquier cosa”.
“Eso es lo que nos tiene que preocupar”, coincidió Mcgill, quien catalogó de “locura” el hecho de “que haya jueces que creen que entienden mejor que la FDA si un medicamento es seguro y eficaz o no”.
Cabe descartar que si la mifepristona pierde su condición de medicamento aprobado, o si se restringe su uso, el misoprostol podría convertirse en la única opción para el aborto con medicamentos y en el próximo campo de batalla del aborto.
Sin embargo, el desafío legal sin precedentes a una píldora abortiva muestra cómo la otra podría ser igualmente vulnerable. Si bien es poco probable que la aprobación del misoprostol como medicamento para las úlceras se vea amenazada legalmente, su uso en el aborto sí podría hacerlo.
Según el Instituto Guttmacher, una organización sin ánimo de lucro que apoya el derecho al aborto, el 54% de las interrupciones de embarazos en Estados Unidos en 2022 fueron con píldoras abortivas como la mifepristona o el misoprostol.
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