El repunte de la migración mexicana a EE.UU.

Estados Unidos registró un récord de migrantes mexicanos desde el año pasado, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) y el perfil se ha visto opacado por la estridencia del éxodo de los otros países

Alvaro Beltrán en el desierto texano. El repunte de la migración mexicana a EE.UU.

Alvaro Beltrán en el desierto texano. Crédito: Alvaro Beltrán | Cortesía

MÉXICO.- Ocho años después de dejar Atlanta, Álvaro Beltrán volvió con bríos renovados y condiciones de empleo mejoradas como ocurre con muchos en la más reciente ola de migrantes mexicanos hacia Estados Unidos.

“Ya me estaban esperando”, cuenta en entrevista con este diario horas después de su arribo a Georgia a donde emigró a principios de mayo pasado desde el estado de Hidalgo.

Estados Unidos registró un récord de migrantes mexicanos desde el año pasado, según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) y el perfil se ha visto opacado por la estridencia del éxodo de los otros países.

A diferencia de centroamericanos, cubanos, haitianos y otros de Latinoamérica que van en familia, el mexicano, por lo general viaja solo y hace menos ruido. Pero se ha ido.

En 2022, de las 2.5 millones de personas que fueron detenidas en la frontera, una tercera parte eran mexicanas. Según CBP entre octubre de 2021 y febrero pasado detuvo en promedio 2,071 connacionales al día.

México había reconocido la disminución de la emigración hasta tasa cero en 2015, cuando entraba el mismo número de indocumentados de los que se repatriaban.

La emigración actual desde México tiene una explicación desde muchos aspectos, según analistas. Desde la violencia a los malos sueldos en México, la mano de obra que necesita EE.UU. y todos los frenos que ha puesto a los otros grupos migratorios, explicó al analista del Colegio de la Frontera Norte, José María Ramos. “Es multifactorial”, destaca.

Condiciones en EU

Alvaro Beltrán, de 35 años, decidió emigrar cuando EE.UU. tenía todos los ojos de la política, la seguridad y la atención internacional en la frontera antes de la finalización del Título 42  y el arranque del Título 8.

A diferencia del Título 42 que regresaba a los inmigrantes que buscaban refugio o asilo a México para esperar su trámite o a los sin papeles simplemente los expulsaba fastrack; a partir del pasado 11 de mayo, el Título 8 permite al Estado prohibir el ingreso hasta por cinco años a quien intente cruzar sin documentos y puede proceder penalmente para llevarlo a prisión.

El Título 8 se aplica desde hace muchos años en ciertas regiones y los mexicanos han tomado ese riesgo; en el caso del éxodo de otros países, el reto se complica porque antes de llegar a EE.UU. debe asumir otros riesgos, incluyendo el paso por México. 

Por ello se prevé que será más fácil para los mexicanos llegar allá, donde hay una escasez inédita de mano de obra. “Yo solo tardé ocho días en llegar desde Tizayuca hasta mi destino en Atlanta”, detalla Alvaro Beltrán. 

Antes de partir, el hidalguense tenía mucho miedo. Se decía que la frontera estaba vigilada con uñas y dientes, cuchillos, armas largas y una serie de medidas por parte del gobierno estadounidense, pero él quería irse y se armó de valor con un huevo de avestruz que le regaló su amigo Luis García como símbolo de hombría.

 Al llegar a la frontera, la realidad fue otra: no encontró ninguna amenaza.

“Por donde entré no había ninguna vigilancia, iba con otros amigos, y ya en Texas nos esperaba el coyote con otras 45 personas, casi todas mexicanas, caminamos unas ocho horas por el desierto y listo: tomamos un autobús”.

En Atlanta, lo esperaban su mamá y un empleador con quien siempre había trabajado en la construcción. 

Sus amigos lo habían estado animando para que se fuera, decían que las obras estaban paradas porque quienes tienen papeles no quieren hacer ese trabajo y que podría ganar entre 300 y 400 dólares diarios porque ya sabía hacer el trabajo y, sino, mínimo 200.

“Cuando me fui en 2016 pagaban a siete dólares la hora; hoy, pagan 14. Es muy buen pago, aún cuando la renta también ha aumentado”.

El informe anual del Consejo de Asesores Económicos del presidente Joe Biden señaló que “es probable que la mano de obra siga constreñida” a pesar de las visas temporales debido a que  no se ha recuperado la mano de obra desde “la gran dimisión” en la pandemia además del envejecimiento poblacional y la menor participación de adultos estadounidenses en el mercado.

El factor mexicano

Alvaro Beltrán había vivido 17 años en Atlanta cuando agentes de ICE llegaron a buscar a un familiar a su departamento y, de paso, le tomaron a él sus huellas digitales. Fue deportado. En México y aquí no le fue mal, pero “vivía al día”. 

“En EE.UU. puedes comprarte lo que quieras con el salario mínimo y en México no”, detalla para explicar lo que los economistas señalan como ausencia de políticas estatales para evitar la precariedad laboral. 

Después de trabajar un tiempo como ayudante de albañil, se hartó de vivir tan restringido en la economía y abrió un negocio de abarrotes que quebró en la pandemia. Como pudo, sobrevivió porque no tiene hijos ni a nadie que mantener salvo a sí mismo y abrió un bar cuando las cosas de pusieron mejor por la vacuna contra el coronavirus.

Todo iba bien y las ganacias eran buenas hasta que llegó el crimen organizado para extorsionarlo y botar muertos por aquí y por allá. Durante el sexenio del presidente Andrés Manuel López Obrador se han registrado más de 150,000 víctimas de homicidio doloso, según cifras del Observatorio Nacional Ciudadano. 

Luego el papá de Alvaro Beltrán tuvo un accidente y en la atención de su salud se fueron las finanzas a pique. Fue la gota que derramó el vaso: era tiempo de que tomar acción hacia EE.UU., dice el migrante.

“Fui a la embajada de EE.UU a pedir perdón y me lo dieron y yo quería sacar una visa de trabajo pero no había citas hasta el 2024 y yo ya no tenía dinero”.

Echó en una bolsa unas galletas, barritas energizantes, frijoles y atún enlatado, saborizantes para el agua y se lanzó al desierto. No llevó el huevo porque podía romperse, pero se lo van a enviar por paquetería.

—¿Cómo te sientes en Atlanta después de tantos años? 

—Normal, como si no me hubiera ido. También soy de aquí como de Hidalgo.

Sigue leyendo:

– Autoridades rescatan a 113 inmigrantes que estaban secuestrados en Sonora, México
– Tras el secuestro de 50 migrantes en México, una de las víctimas recordó la pesadilla que vivieron
– El Cártel del Golfo exigía 1,500 dólares por cada uno de los migrantes secuestrados en México

En esta nota

Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP)
Contenido Patrocinado
Enlaces patrocinados por Outbrain