Con Christian Pulisic en plan estelar, Estados Unidos elimina y humilla a México en la Liga de Naciones de Concacaf y se cita con Canadá en la final
La Selección de México termina maniatada y cayendo sin argumentos futbolísticos ante Estados Unidos; el Tricolor perdió la compostura y sus seguidores también, obligando al árbitro a finalizar el partido antes de tiempo
La Selección de Estados Unidos se impuso con marcador de 3-0 a México en Las Vegas e inscribe su nombre en la final de la Liga de Naciones de la Concacaf en donde se estarán midiendo a Canadá. En una noche estelar de Christian Pulisic que se lució con par de anotaciones que sentenciaron a los dirigidos por el argentino Diego Cocca.
Y es que la noche no empezaba bien para el seleccionador argentino que sin siquiera comenzar el partido fue silbado por el mismo público mexicano al escuchar su nombre en la presentación. No obstante y a pesar de que México empezaría con ganas el encuentro, las opciones se fueron diluyendo y el Tri iba a caer contra el Team USA y así igualaría la racha de partidos sin victorias contra su archirrival más larga, con seis partidos, misma cifra que sumaron entre 2011 y 2015.
Tristemente la Selección de México terminó perdiendo la compostura ante un rival que lo maniató y sacó a relucir todas las falencias que había mostrado en los juegos amistosos. El juego fue terminado por el árbitro antes de los 12 minutos adicionales debido a la reiteración de muchos aficionados en el estadio de los Raiders de Las Vegas que realizaron el llamado grito discriminatorio.
“El Capitán América”, como se conoce a Christian Pulisic, iba a abrir el marcador para los dirigidos por BJ Callaghan, quien antes del encuentro ya había declarado que estaban preparados para todo. Así fue como el jugador del Chelsea en un enredo en el área aprovechó y mandó a guardar el primer tanto del equipo de las barras y las estrellas.
En la celebración fue regañado por el árbitro quien lo mandó a acomodar el banderín de saque de esquina que pateó durante su eufórico festejo en medio de un baño de cerveza.
Antes de finalizar la primera parte, el estelar futbolista Christian Pulisic completaba su doblete y llevaba al Team USA a irse arriba en el descanso sobre los mexicanos que ya se mostraban muy nerviosos y con una nula capacidad de reacción.
México lo intentaría en la segunda mitad, sin embargo Estados Unidos se seguía mostrando sólido, lamentablemente el protagonista iba a ser el árbitro que a pesar de no influir en el resultado, actuó con poca autoridad, lo que lo llevó a tener que mostrar par de tarjetas rojas al mexicano César Móntes, por una patada descarada, y al estadounidense Weston McKennie.
Montes estaba enojado por un golpe previo que se llevó en la espinilla y que no fue sancionado. En general, los tricolores se dedicaron a buscar pleito, a provocar al rival, claramente frustrados por no poder con fútbol.
El público mexicano gritaba a Diego Cocca para que diera ingreso a Santi Giménez que fue aplaudido por su ingreso, el cual sin embargo no cambiaría las cosas. Por su parte la afición estadounidense se encargaba de recordar el 2-0 del Mundial de 2002 a los mexicanos.
Al minuto 78 Ricardo Pepi, el del Groningen, le echaba más leña al camión de fuego de Diego Cocca y ya convertía la semifinal en goleada con el 3-0 para los estadounidenses.
Al minuto 85, Sergiño Dest y Gerardo Arteaga también fueron expulsados de un partido que tuvo varios encontronazos al mejor estilo de estos clásicos.
Este es el sexto encuentro de Diego Cocca al mando de la Selección de México y la primera derrota, siendo el juego más importante de su corto paso por el equipo hasta ahora. Tras cinco presentaciones anteriores había sumado dos victorias y tres empates, pero seguramente esta derrota va a pesar mucho para la opinión pública y para quienes siguen observando un mal funcionamiento del Tri, el cual hoy queda desnudado con este duro revés.
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