La cárcel donde Donald Trump sería recluido en Atlanta tiene antecedentes de brotes de COVID, piojos y sarna

Luego de ser acusado por Fani Willis, fiscal de distrito del condado de Fulton, de 13 cargos por presuntamente tratar de intervenir en las elecciones de Georgia en 2020, al expresidente Donald Trump podría esperarle una temporada de prisión en una cárcel con antecedentes de brotes de COVID-19, piojos y sarna.

De acuerdo con las instrucciones giradas por Willis, Trump y otras 18 personas señaladas como cómplices tienen hasta antes del 25 de agosto para entregarse de manera voluntaria y aceptar su culpabilidad.

En caso de aceptar la oferta de la fiscal, los implicados deberán acudir a la cárcel de Rice Street, Atlanta, inmueble construido en el condado de Fulton, en 1985, para originalmente albergar a cerca de 1,300 reclusos, pero que ha llegado a tener más de 3,000 prisioneros, lo cual la convierte en un sitio sucio y casi derruido en algunas áreas con equipo roto.

Ante la remota posibilidad de que Donald Trump acepte por voluntad propia acudir para entregarse a las autoridades, Pat Labat, alguacil del condado de Fulton, declaró ante varios medios de comunicación que los funcionarios a su cargo seguirían el procedimiento normal al procesar al expresidente, lo cual implicaría primero esposarlo para después tomarle sus huellas dactilares y una fotografia de registro.

Con respecto al sitio donde temporalmente permanecería el político republicano de 77 años, el Centro Sureño de Derechos Humanos dio a conocer hace unos meses que presenta “condiciones de vida antihigiénicas” relacionadas con brotes de COVID-19, piojos e incluso sarna.

Al respecto, la oficina del alguacil del condado de Fulton describe a su cárcel como un inmueble que se está erosionando rápidamente y por ello demanda la construcción de uno nuevo con valor aproximado a $ 1.7 mil millones de dólares.

Cabe señalar que, en septiembre del año pasado, la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), una organización sin fines de lucro y progresista de Estados Unidos, emitió un informe donde menciona que 117 personas habían esperado durante más de un año en la cárcel de Rice Street para que se les dictara sentencia; en tanto que al menos otra docena llevaba hasta dos años en la misma situación.

Bajo dicha referencia, Donald Trump y sus 18 presuntos cómplices tendrían que enfrentarse a una situación similar, sólo que pare hipotéticamente llegar a esa situación primero tendrían que ser juzgados, lo cual ocurriría hasta el próximo año para darle tiempo sus abogados a preparar sus respectivas estrategias de defensa.

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