Nuevos detalles del homicidio de la niña de 11 años estrangulada y violada; el sospechoso será extraditado a Houston 

La niña le dijo a su padre que vio en las escaleras “al vecino del pelo largo” antes del que el sospechoso la atacara en el interior del apartamento

La víctima María González (izq). El sospechoso, Juan Carlos García Rodríguez.

La víctima María González (izq). El sospechoso, Juan Carlos García Rodríguez. Crédito: Pasadena Police | Cortesía

HOUSTON – Dos días después de que las autoridades lograron el arresto del hombre acusado de estrangular y violar a una niña de 11 años en las instalaciones de un complejo de apartamentos en la ciudad de Pasadena, se dieron a conocer nuevos detalles del homicidio.

Según la investigación, Ana González, la niña de 11 años estrangulada y violada, vio en las escaleras adjuntas a su vivienda “al vecino del pelo largo”, cuando ella regresaba de botar la basura antes del ataque brutal dentro del apartamento.

Esto se lo dijo a su padre, Carmelo González, vía telefónica luego de que éste le preguntara por una voz de hombre que se escuchaba en el fondo.

Según la Policía, esta descripción coincidió con la de Juan Carlos García Rodríguez, quien enfrenta cargos de homicidio agravado y se encuentra detenido en Shreveport (Louisiana) a espera de ser extraditado al Condado Harris.

La última comunicación entre padre e hija se dio hacia las 10:02 a.m. del sábado 12 de agosto cuando ella le dijo, a través de un mensaje de Whatssap, que alguien estaba tocando la puerta del apartamento.

Carmelo González le preguntó posteriormente que si había abierto y que si alguien había entrado a la vivienda. La niña le respondió, según dijo el papá a las autoridades, “que ella aún estaba en la cama de su habitación”.

Esas fueron las últimas palabras que la niña le envió vía texto a su padre. Después de esto no volvió a recibir mensajes de Ana, a pesar de que él le hizo varias preguntas posteriores.

González regresó de su trabajo hacia las 2:30 p.m. y allí se encontró con su hija muerta, envuelta en una bolsa negra dentro de una canasta de ropa sucia.

El jefe de González confirmó que el sospechoso trabajó ese sábado 12 de agosto entre las 10 a.m. y las 2 p.m.

El Instituto de Ciencias Forenses del Condado Harris determinó que Ana murió a causa de un golpe contundente en la cabeza y que también fue objeto de estrangulamiento. La menor también fue objeto de abuso sexual.

Dos hechos llamaron la atención de las autoridades antes de que se emitiera la acusación y orden de captura en contra de García Rodríguez.

Una, la coincidencia física del pelo largo y, la segunda, que en declaración dada a las autoridades el día del crimen, él manifestó que había pasado la noche en otro apartamento y que había regresado a su vivienda hacia la 1 p.m.

Las personas con las que se quedó esa noche del viernes 11 de agosto dijeron que García había salido del lugar hacia las 9 a.m. hacia su apartamento. Una diferencia de cuatro horas frente al testimonio ante los policías.

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