Checo Pérez no tuvo suerte en Singapur y quedó lejos del podio en debacle de Red Bull Racing
No solamente el Checo Pérez, Red Bull Racing vivió una debacle anunciada en el Gran Premio de Singapur y vio cortada su racha de 14 victorias consecutivas en la Fórmula 1 esta temporada 2023
Sergio 'Checo' Pérez, piloto mexicano de Red Bull Racing, durante el GP de Singapur 2023. Crédito: Mark Thompson | Getty Images
El Gran Premio de Singapur no fue una buena carrera para Sergio ‘Checo’ Pérez, para su compañero y campeón defensor Max Verstappen y en general para el equipo Red Bull Racing, que quedó lejos del podio y cortó su racha de victorias en la Fórmula 1.
Ya desde la clasificación se vislumbraba una difícil carrera para el piloto mexicano, ubicado en la posición 13, Verstappen más adelante en la 11°. A pesar de la agresiva estrategia de la escudería del ‘Toro’, la carrera fue toda para Ferrari con Carlos Sainz saliendo triunfador y escoltado por Lando Norris (McLaren) y Lewis Hamilton (Mercedes).
En 14 quedaron los primer lugar consecutivos de Red Bull esta campaña (12 de Verstappen, 2 de Checo Pérez), cortado más allá de por una Ferrari que sigue redescubriéndose, por sus propios errores desde la clasificación en el circuito de Singapur.
También se rompió la hegemonía del campeón Max Verstappen, que desde el GP de Miami no sabía lo que era otra posición que la primera (10 en fila) en esta temporada 2023.
Carrera tranquila con final emocionante; Checo Pérez lejos de la pelea
El inicio del GP de Singapur fue tranquilo para tratarse de un trazado angosto. Los pilotos pensaron más en conservar neumáticos, reducir el desgaste, imponiendo un ritmo bajo para asegurarse hacer solo una parada.
Solo el adelantamiento de Leclerc en la salida a Russell para colocarse segundo alteró los planes de la cabeza, ya que Hamilton, que adelantó a su compañero Russell y a Lando Norris, tuvo que devolver ambos lugares por salirse de la pista en la maniobra de adelantamiento.
20 vueltas de calma, de coches en fila, que rompió el accidente del estadounidense Logan Sargent (Williams) al irse largo en la curva 8, impactando contra las barreras y rompiendo el alerón delantero. El piloto norteamericano siguió la marcha, con el alerón enganchado debajo de su coche, lo que dejó muchas piezas de fibra de carbono sobre la pista y los comisarios deportivos decidieron sacar el coche de seguridad para poder limpiar el trazado.
Con la marcha ralentizada, todos los pilotos, menos los dos Red Bull, aprovecharon para parar en boxes y poner la goma dura hasta el final. Un neumático que ya llevaban de inicio tanto Max Verstappen (segundo en la relanzada) como Sergio Pérez (cuarto), y de ahí su decisión de no parar cuando salió el coche de seguridad. Eso sí, su ritmo fue menor y fueron cayendo posiciones.
Fernando Alonso sí paró, pero en la entrada a la calle de boxes cruzó la línea blanca de separación con la pista por entrar pasado de velocidad y fue sancionado con cinco segundos extra de tiempo.
Una penalización sorprendente porque en los entrenamientos libres se solventó con bandera blanca y negra -que no repercute en sanción y sí como aviso por una infracción leve-, y que pasó factura al piloto español al tratarse de una carrera muy apretada.
Tanto Russell como Hamilton, los dos Mercedes, entraron a boxes a poner neumático medio nuevo. Volvieron a pista cuarto y quinto, respectivamente, y rodaron mucho más rápido que sus rivales.
Tanto que lograron luchar por la victoria en cuatro últimas vueltas frenéticas, aunque no pudieron llegar a inquietar a un Carlos Sainz que gestionó con maestría su distancia en el liderato y culminó una victoria de principio a fin que supuso el fin de la hegemonía de Red Bull.
Mientras que se fraguaba dicha lucha en las últimas vueltas, Fernando Alonso confirmó que este fin de semana en Singapur fue el peor de la temporada para él. Durante muchas carreras del año se mostró como gran alternativa a los Red Bull, pero justo el único día -hasta el momento- que fallaron los austríacos, el Aston Martin del español no tuvo el rendimiento para luchar por la trigésima tercera victoria; aunque llegó la segunda de Sainz y la número 34 para el automovilismo español en la Fórmula Uno.
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