De Caro Quintero a Ovidio Guzmán: Enfermedades que padecen los grandes capos mexicanos

Odiados por muchos, admirados por algunos y temidos por otros, así son los grandes capos mexicanos quienes mediante actividades criminales han logrado fortunas y vidas de ensueño, pero detrás de las puertas de sus hogares son como cualquier otra persona y las enfermedades que padecen son prueba de ello, haciéndolos vulnerables, ya que la salud ha sido el talón de Aquiles para unos cuantos de ellos.

Sus propios cuerpos les han pasado factura, finalmente llevar una vida en la clandestinidad no es algo sencillo, pese a tener una fortuna disponible para atender cada situación adversa que se les presente, por ello las enfermedades se han hecho presentes en varios de los capos con mayor renombre a nivel internacional.

Esto se prueba con declaraciones, registros y visitas a hospitales, según han abordado diversos medios mexicanos como Milenio, el cual ha detallado las enfermedades que algunos narcotraficantes padecen o padecieron y que no son restrictivas a los de mayor edad, pues también los jóvenes las padecen.

Los capos del extinto Cártel de Guadalajara

Recientemente se informó que Rafael Caro Quintero fue trasladado a un hospital, y aunque no se informó el motivo, se sabe que “El Narco de Narcos” tiene problemas en la próstata, los cuales podrían derivar en cáncer, por ello la periodista Anabel Hernández dijo que en los años que estuvo prófugo de la justicia pensó en entregarse a las autoridades, pues su salud estaba mermada. 

Otro miembro del extinto Cártel de Guadalajara, Miguel Ángel Félix Gallardo, ha mostrado serios problemas de salud que han hecho que sus abogados defensores pidan la prisión domiciliaria. “El Jefe de Jefes” tiene 77 años y 22 enfermedades, entre las que destacan sordera izquierda, diabetes, esofaguitis, tuberculosis pulmonar latente, glaucoma, carcinoma facial, hipertensión, hernia de disco; así como padecimientos mentales: ansiedad y depresión crónicas.

Ernesto Fonseca Carrillo es considerado el tercer fundador del Cártel de Guadalajara, como sus compañeros cayó ante la justicia y la edad le ha pasado factura, pues presenta varias enfermedades, según dio a conocer su hija Yoanna Carrillo. “Don Neto” padece, entre otras enfermedades, cáncer de colon, reumatismo, hernia hiatal, hipertensión, paralización parcial del brazo derecho, y está casi ciego.

Cártel de Sinaloa bajo la sombra de la enfermedad

Joaquín “El Chapo” Guzmán fundó, junto a otros dos capos, el Cártel de Sinaloa, la organización criminal más grande del mundo en la actualidad, lo que lo volvió un objetivo prioritario de la justicia, entró y escapó de la cárcel en varias ocasiones, hasta que fue extraditado a EE.UU. donde cumple una sentencia de cadena perpetua, aquel capo que parecía inquebrantable padece gastritis e hipertensión arterial.

Sus abogados han hecho saber que el aislamiento ha mermado su estado de salud físico y mental, “Padezco dolores de cabeza, pérdida de memoria, calambres musculares, estrés y depresión”, aseguró en una carta. Además está enfermo de disautonomía, una disfunción de los nervios que puede ser fatal y que afecta tanto el corazón como el cerebro.

Su hijo, Ovidio Guzmán, que recientemente fue extraditado a EE.UU. también padece problemas de salud gastrointestinales, lo que lo hace requerir una dieta especial, además se informó que padece depresión y ansiedad, por lo que lleva un tratamiento médico.

Otro de los fundadores del Cártel de Sinaloa, Héctor “El Güero” Palma tiene una salud muy mermada, lleva varios años en reclusión y ha visto la libertad en dos ocasiones, pero de inmediato volvió a prisión. El hombre que tiene una trágica historia familiar sufre varios padecimientos que van desde hemorroides, mala visión, problemas de cadera y próstata, ausencia de piezas dentales e incluso una hernia inguinal.

Al CJNG también lo acecha la enfermedad

Nemesio Oseguera Cervantes, mejor conocido como “El Mencho” es el líder y fundador del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), uno de los objetivos prioritarios de la justicia, aunque parece ilocalizable.

Pero detrás de aquel hombre sanguinario, poderoso y billonario, hay un ser enfermo que, de acuerdo con la DEA, ha gastado millones en construir hospitales para tratar sus padecimientos renales y de páncreas.

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