EE.UU. va a mantener su frontera cerrada aunque cierre el gobierno, advirtió DHS

Decenas de miles de empleados en todo el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) se están preparando para presentarse a trabajar con la perspectiva de no recibir un cheque de pago debido al cierre del gobierno, pero autoridades de la agencia federal advirtieron el viernes que la Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) seguirá vigilando los cruces irregulares de inmigrantes indocumentados en la frontera.

“El personal de nuestra Agencia de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) continuará su misión protegiendo nuestra frontera y puertos de entrada priorizando nuestra seguridad nacional”, explicó en una rueda de prensa Blas Núñez Neto, subsecretario de Política Fronteriza del DHS.

El funcionario remarcó que “la frontera no está abierta ni estaría abierta a la inmigración irregular” pese al posible cierre del gobierno federal por la falta de acuerdo entre legisladores demócratas y republicanos en el Congreso.

Núñez Neto recordó que el gobierno de Joe Biden ha agravado las consecuencias para los cruces de inmigrantes indocumentados desde que en mayo se levantó el Título 42, la política de expulsiones que se aplicó durante la pandemia de Covid, y que esto implica la aplicación de expulsiones y deportaciones inmediatas de las personas que no estén autorizadas a entrar en el territorio de Estados Unidos.

Desde entonces, los migrantes venezolanos, cubanos, nicaragüenses y haitianos son devueltos a México, mientras que el resto son retornados a sus países de origen y afrontan un posible veto de cinco años para volver a ingresar a Estados Unidos.

Desde el 12 de mayo, más 253,000 personas han sido deportadas a 152 países, afirmó Núñez Neto.

El funcionario instó a las personas que quieran llegar a Estados Unidos a que lo hagan de forma legal y regular pidiendo una cita en la aplicación CBP One para solicitar un permiso humanitario en lugar de intentar cruzar la frontera.

A pesar de las nuevas políticas migratorias, la presión por la llegada de miles de inmigrantes a la frontera continúa en aumento, pues las autoridades detuvieron en agosto a 232,972 personas, la mayor cifra mensual en lo que va de año.

Según algunos medios, Estados Unidos y México habrían alcanzado un acuerdo para ampliar las deportaciones de migrantes indocumentados varados en ciudades mexicanas de la frontera.

La canciller mexicana, Alicia Bárcena, confirmó el viernes que su gobierno evalúa poner en marcha vuelos de deportación a Ecuador, Venezuela y Colombia, que se sumarían a los que ya existen a Guatemala, Honduras y El Salvador. 

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