Un asesino serial de Texas se declaró culpable de matar a 4 personas, incluido el padre de su exnovia

Un hombre de Texas se declaró culpable de asesinar a cuatro personas, incluido el padre de su exnovia, en una ola de asesinatos que duró tres semanas en el otoño de 2020.

El acusado, identificado como Jeremy Rashaud Williams, pasará el resto de su vida en prisión como parte del acuerdo de culpabilidad a cambio de desechar la pena de muerte, según informaron NBC DFW y Fox 4.

El 31 de octubre de 2020, Robert Jaden Urrea fue asesinado a tiros en medio de la calle, según lo capturado por imágenes de vigilancia en ese momento. El estudiante de derecho de 19 años sucumbió a sus heridas cuando fue trasladado al hospital.

Estaba esperando un Uber para ir a casa después de una fiesta de Halloween, le dijo a People Patrcia Weaver, su madre, quien señaló que Harris apuntó y “cazó” a sus víctimas “como si no fueran seres humanos”.

Dos semanas después, el 14 de noviembre, Adam Gautreau fue asesinado a tiros en una vía de servicio interestatal, informó NBC DFW.

Menos de una hora después, la policía respondió a otro tiroteo a unas diez millas del lugar de la muerte de Gautreau. Los agentes que acudieron encontraron a Jerome Hamilton en el asiento del conductor con una herida de bala y el hombre de 57 años murió poco después de ser llevado al hospital.

Posteriormente, el 18 de noviembre, Harris mató al padre de su exnovia, Blair Carter, de 60 años, antes de prender fuego a la casa de la víctima en Celina. La hija de Carter, Amber, había presentado órdenes de protección contra Harris, que él violó repetidamente.

Los oficiales arrestaron a Harris el mismo día después de concentrarse en su búsqueda utilizando la descripción de su vehículo proporcionada por testigos.

Familiares de las víctimas reaccionan a la sentencia

Tras darse a conocer la sentencia, los familiares de sus víctimas compartieron su testimonio. “Hoy fue muy emotivo, pero fue parte del proceso de curación”, dijo Monique Silas, sobrina de Hamilton, a NBC DFW después de la audiencia.

Weaver, la madre de Urrea, dijo que, aunque temía que fuera doloroso enfrentarse a Harris, “miré al asesino de mi hijo a los ojos” mientras le mostraba una foto de la víctima.

Aunque la mujer mencionó que está satisfecha con el veredicto y, si bien significa que las familias tienen justicia, no cree que haya un cierre.

“¿Cómo puedes tener un cierre cuando no había remordimiento ni motivo?”, culminó.

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