Atacan el ausentismo crónico en las aulas del distrito escolar de Los Ángeles

Gerson Nahúm Escobar es un padre hondureño de un adolescente, Anthony, de 14 años y de José, de seis años, quienes, por diversos motivos han faltado de forma continua a la escuela.

Escobar, originario de San Pedro Sula, acepta que su hijo Anthony ha fallado, que a veces que se hace el enfermo o se queja que duele una rodilla, no va a clases y termina yéndose con sus amigos.

“Gracias a Dios ya solventamos eso; ya no está fallando y gracias a Dios está en la escuela”, dijo el progenitor de Anthony, durante la visita personal que le hizo Alberto Carvalho, el superintendente del Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles (LAUSD).

Como parte del programa de extensión estudiantil iAttend (Yo atiendo) del distrito escolar, Carvalho espera atender a las necesidades de las familias que luchan por llevar a sus hijos a la escuela.

Anthony Escobar tenía ausencias este año a la secundaria Joseph Le Conte de Hollywood.

“Tenemos maestros y directores de escuelas que son muy buenos; tenemos también sistemas de apoyo muy buenos, pero no podemos enseñar a los niños ausentes”, dijo Carvalho a Gerson Nahúm Escobar. “Venimos, no para criticar, sino para traer soluciones, incluyendo ayuda financiera”.

De hecho, el padre de Anthony recibió dos tarjetas de compras, una por parte del superintendente Carvalho, y otra del director de la escuela, Eduardo Durán.

Tanto para Anthony, como para su otro hijo, José, quien acude a la primaria Santa Mónica Boulevard Community Chárter les llevaron mochilas nuevas, un balón de futbol y artículos escolares.

Anthony ha recibido ayuda de un psicólogo. El niño perdió a su madre, Gabriela, hace tres años.

Tras expresar sus condolencias, el superintendente Carvalho ofreció recursos socioemocionales de apoyo para la salud mental del adolescente y su padre.

“Nuestras escuelas son los centros donde detectamos los síntomas de ansiedad, de depresión y las soluciones están allí, con profesionales que pueden ayudarle a Anthony y a usted”, manifestó Carvalho.

En este semestre, el LAUSD avanzó en dos objetivos clave postpandemia: aumentar las tasas de graduación y reducir el ausentismo crónico, que, durante la pandemia alcanzó el 46% de todos los estudiantes del distrito. Significaba que, entre los 500,000 estudiantes (230,000 en total) habían faltado al 10% o más de sus clases.

Sin embargo, desde que el superintendente puso en marcha la iniciativa iAttend, descrita en el Plan Estratégico 2022-26, , dicho ausentismo crónico se ha reducido al 36%.

“Ya tocamos las puertas de más de 27,000 familias aquí en nuestra comunidad”, declaró Alberto Carvalho, a La Opinión. “Debido a los esfuerzos y comunicación con los padres, hemos mejorado dramáticamente nuestro ausentismo crónico”.

“El año pasado el ausentismo crónico llegó a un 50% (250,000 estudiantes), y ya lo reducimos”, añadió. “Con ello, la asistencia escolar ha subido al 92%, que es mucho mejor, comparable con los porcentajes del nivel prepandémico, pero todavía tenemos que hacer mucho trabajo”.

Lucha cuesta arriba

El incremento de ausencias crónicas no solamente desafía a las escuelas de Los Ángeles, del estado, sino de todo el país.

Nuevos datos del Departamento de Educación de los Estados Unidos muestran hallazgos sorprendentes a nivel escolar: en 2021-22, dos tercios (66%) de los estudiantes matriculados asistieron a una escuela con niveles altos o extremos de ausencia crónica.

Lo anterior significa que al menos uno de cada cinco estudiantes de su escuela estuvo ausente casi cuatro semanas durante el año escolar, de acuerdo con Attendance Works, una iniciativa estatal y nacional que impulsa mejores políticas y prácticas para mejorar la asistencia escolar.

Publicados a través de Ed Data Express, los datos nacionales muestran que casi 14.7 millones de estudiantes (29.7%) estuvieron ausentes crónicamente en el año escolar 2021-22. El aumento en las ausencias significa que aproximadamente 6.5 millones de estudiantes más faltaron el 10% o más de los días escolares, en comparación con el año escolar anterior a la pandemia.

Las peripecias de Gerson

Gerson Nahum describió que su hijo Anthony, de 14 años se va solo a la escuela y al menor, José, una conocida lo lleva a la primaria, ya que él tiene que ir a trabajar a la construcción.

“Al menor lo vamos a recoger a la escuela, a las 6:00 de la tarde y Anthony pues él se va solo y hay veces que se me escapa tal vez con sus amigos o algo, pero ahorita, gracias a Dios pues ya tiene un periodo que no ha estado fallando a la escuela”, dijo Gerson.

Para su bienestar, cada vez que se ausenta de clases o llega tarde su hijo, recibe llamadas de la escuela.

Fallecimiento de su madre.

“Creo que eso [fallecimiento de la madre] les afecto a los dos”, dijo Gerson. “Pero uno, como padre tiene que hacerse fuerte para darle una noticia tan fuerte”.

Según Gerson, quien arribó a Estados Unidos hace dos años, a su hijo Anthony le atrae la Marina de los Estados Unidos

“Hay que apoyarlo, porque venimos a este país a superarnos”, subrayó. “Aquí no es como Honduras; allá no hay mucha ayuda”.

Experiencia personal de Carvalho

Comprometido para disminuir los índices de ausentismo crónico en el LAUSD, el superintendente Alberto Carvalho narró a La Opinión que su meta nace de la propia experiencia familiar.

“Éramos seis en mi familia y yo fui el único que completo la secundaria; mis hermanos y hermanas no lo consiguieron”, dijo. “Teníamos problemas y necesidades especiales, además de la pobreza, y por eso, para mí como maestro, director de escuela, superintendente y padre de familia siento una responsabilidad moral y profesional de entender las razones escondidas por los cuales los niños faltan a la escuela”.

¿Qué pensó cuando se enteró que la madre del niño Anthony Escobar había fallecido?

“Tener el conocimiento de las dificultades que nuestros niños enfrentan nos da a nosotros la habilidad de ayudarlos, de apoyarlos de una forma muy específica”, respondió.

“Eso requiere que nosotros tenemos que ir a las calles y a las casas, hablar con padres de familia y no quedarnos sentados en nuestras oficinas; todos somos una familia unida del sistema unificado Los Ángeles”.

Por su parte, Sandra González, trabajadora de servicios y asistencia a las personas en el LAUSD, quien ha sido parte fundamental en el caso de los hijos de Gerson Nahum, expresó que su trabajo es conectarse con las familias, crear relaciones positivas entre la escuela y la comunidad, además de ofrecerles los apoyos y conectarlos con los servicios que necesitan.

“A veces las circunstancias de las familias son un poco difíciles: ellos tienen que trabajar, y junto con sus hijos tiene que acoplarse a un nuevo país, a un nuevo sistema educativo, a crear relaciones nuevas y un idioma diferente”, subrayó. “Cada caso es distinto, pero lo más importante es ayudarle a los papás a entender por qué es tan importante que los niños estén yendo siempre a la escuela y apoyarlos para que regresen”.

Asistencia: Estadísticas a nivel de distrito y escuela que miden asistencia excelente y ausencia crónica.

Estudiantes con excelente asistencia, 2022-2023:  35.5%. Año previo: 31.2%. Mejoría del 4.4%

Estudiantes ausentes crónicos de grados K-8, 2021-2022: 38.4%. Año previo 24.3%. Mejoría del 14.1%

Estudiantes ausentes crónicos de grados K-12, 2022-2023: 36.5%. Año previo 45.2%. Caída del 8.8%

Estudiantes ausentes crónicos de grados K-5, 2022-2023: 36.4%. Año previo, 47.0%. Caída del 10.6%.

Estudiantes ausentes crónicos de grados 6-8, 2022-2023: 32.4%. Año previo, 40.1%. Caída del 7.7%.

Estudiantes ausentes crónicos de grados 9-12, 2022-2023: 39.4%.  Año previo, 46.0 %. Caída del 6.6%.

Fuente: LAUSD Open Data