América y Tigres, luz y sombra de la Liga MX en la Concachampions
Las Águilas del América y los Tigres de la UANL mostraron las dos caras de la moneda en la Concachampions: los primeros no tuvieron compasión del New England Revolution y los segundos quedaron eliminados a manos del actual campeón de la MLS, el Columbus Crew
Las Águilas del América no tuvieron compasión del New England Revolution para golearlos 5-2 en la vuelta de los cuartos de final de la Concachampions y dejar la serie con un escandaloso 9-2. Crédito: Diego Padilla | Imago7
Tanto el Club América como los Tigres de la UANL fueron el agua y el aceite de la Liga MX contra rivales de la MLS la noche de este martes en la Concachampions, cuando el cuadro de las Águilas no tuvo compasión del New England Revolution para golearlos 5-2 (global 9-2) y así colocarse en las semifinales de esta competencia de la Concacaf.
Mientras que los Tigres, al pecar de soberbia, en el pecado llevaron la penitencia y quedaroneliminados en serie de penales (3-4) a manos del campeón reinante de la MLS, Columbus Crew, que tuvo en su portero Patrick Schulte al héroe de la noche al detener los disparos en la tanda de penales del francés André-Pierre Gignac y del argentino Guido Pizarro.
Así, la historia quedó escrita a favor del América dirigido por el brasileño André Jardine, que nuevamente no dudó en echar mano de lo mejor de su plantel con Julián Quiñones, el chileno Diego Valdés y Henry Martín en el ataque para darle una repasada al equipo estadounidense que en el Estadio Azteca no pudo ni sacar las manos para poder evitar otra goleada.
Los goles de la victoria fueron anotados por el chileno Diego Valdés, Julián Quiñones, Henry Martín, el méxicoamericano Alejandro Zendejas y el uruguayo Brian Rodríguez, mientras que por el New England Revolution se hizo presente en dos ocasiones el albanés Giacomo Vrioni.
El equipo de Massachusetts nunca fue rival del América en el terreno de juego y después del 0-4 del partido de ida solo era cuestión de ver si las Águilas sobrellevaban las acciones o pisaban el acelerador en la vuelta, como finalmente lo hicieron para colocar el marcador final con un agobiante 9-2 que refleja la diferencia de capacidad en el terreno de juego y que le permitió colocarse en la antesala de la gran final de la competencia.
Los Tigres pagaron caro sus pecados
Después del gol tempranero de André-Pierre Gignac en un garrafal error del portero Patrick Schulte en el minuto 3 de acción, los Tigres nunca se animaron a sacar las garras en forma definitiva para aprovechar el estilo precavido de los visitantes.
Por el contrario, apostaron por sobrellevar a su rival y eso les costó caro cuando en el minuto 59 el uruguayo Diego Rossi, en un contragolpe, empató el partido 1-1 y con ello obligó a alargar el juego hasta la serie de penales en donde finalmente se impuso la oncena visitante.
En los penales, las dos figuras de Tigres, el francés Gignac y el argentino Pizarro hicieron grande la figura del portero Schulte, que al detener sus envíos lavó su grave error de la primera parte y con ello catapultó a su equipo a la victoria con marcador de 3-4 que los deposita en las semifinales y convirtió en pesadilla la noche felina.
Luego de las fallas de Gignac y Pizarro en las tandas de penaltis, marcaron por Tigres Herrera, Córdova y Angulo, pero por Columbus tiraron y anotaron Rossi, Russell-Rowe, Matan y, tras la falla de Cucho Hernández, Maximilian Arfsten definió todo al vencer al portero Felipe Rodríguez.
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