Julio Urías llega a positivo acuerdo al no impugnar un cargo de violencia doméstica en su contra
El expitcher de los Dodgers, Julio Urías, es puesto en libertad condicional sumaria por 36 meses y además deberá hacer labor comunitaria y tomar un curso de un año acerca de la violencia doméstica
El lanzador mexicano Julio Urías originalmente tenía cita en una corte de Los Ángeles este 2 de mayo para la lectura de cargos por su caso de violencia doméstica, pero la exestrella de los Dodgers llegó a un acuerdo este miércoles que parece allanar su panorama con la justicia.
Julio Urías no disputó (“no contest”) uno de los cinco cargos por delitos menores que recibió el 8 de abril a consecuencia de un incidente que tuvo con su esposa Daisy. El cargo es “agresión doméstica que involucra relación de pareja”, codificado como 242/243(e)(1). Los otros cuatro cargos fueron removidos, según registros de la corte.
Urías, de 27 años, fue puesto en libertad condicional o probación sumaria por 36 meses. Se trata de la libertad condicional en casos de delitos menores. También se le ordenó completar 30 días de labor comunitaria y un curso de asesoramiento acerca de la violencia doméstica de 52 semanas.
Además, el pitcher mexicano debe pagar una multa -no especificada- para el fondo de violencia doméstica, no tiene permitido poseer ningún arma, tampoco hacer uso de la fuerza o violencia, debe pagar restitución a la víctima y cumplir con una orden, le dijo a La Opinión un vocero de la fiscalía de la ciudad de Los Ángeles.
Al no disputar el mencionado cargo de agresión o batería doméstica, Urías no impugna el cargo por el que se le acusa, pero tampoco admite culpabilidad factual.
Los cuatro cargos por delitos menores que había recibido Urías fueron agresión conyugal, un segundo cargo de agresión doméstica, privación ilegal de la libertad y agresión, según registros de la corte, reportó Los Angeles Daily News.
El panorama se ha ido aclarando para Julio Urías
Para Urías, el panorama empezó a aclararse el 9 de enero cuando su caso fue enviado a la oficina de la fiscalía de la ciudad de Los Ángeles como delito menor.
Urías fue detenido la noche del 3 de septiembre del año pasado al salir del estadio BMO luego de asistir con su pareja al partido del LAFC contra Inter Miami de Lionel Messi. Tras algunas horas en custodia, salió libre bajo fianza. Poco después, fue puesto en licencia administrativa por Major League Baseball mientras se investigaba el caso.
“Ellos se vieron involucrados en una discusión donde el acusado empujó a la víctima contra una cerca y la jaló del cabello o los hombros”, se lee en el documento emitido por la Fiscalía de Distrito del Condado de Los Ángeles. “Ni las lesiones de la víctima ni el historial criminal del acusado justifican la presentación de una felonía. El caso es referido de manera acorde a la fiscalía de la ciudad para consideraciones de delito menor”.
Al finalizar la temporada del béisbol, Urías se convirtió en agente libre. Ya para entonces los Dodgers habían dejado en claro que no intentarían recontratarlo al quitar su nombre del casillero en el vestidor y borrar todas las imágenes suyas en el estadio.
En ocho años con los Dodgers en la Gran Carpa, Urías tuvo marca de 60-25 y 3.11 de promedio de carreras limpias. En 2021 fue el líder de juegos ganados de MLB con 20 y en 2022 encabezó la Liga Nacional en efectividad con 2.16. Sin embargo, en 2023 no le fue bien (11-8, 4.60) antes de la noche del arresto.
MLB no ha emitido ninguna sanción contra Urías toda vez que no tiene equipo, además de que el caso judicial se encontraba en marcha. Urías fue suspendido 20 juegos por MLB en 2019 debido a un primer incidente de violencia doméstica.
Mientras la siguiente escala de Julio Urías en el béisbol está por definirse -se ha mencionado que podría ir a Japón-, su situación legal ya está muy clara.