El silbante Fernando Hernández en el ojo del huracán por dos aparentes pecados en el primer capítulo de la final
La labor del silbante Fernando Hernández en el primer capítulo de la final entre Cruz Azul y América terminó envuelta en la polémica por dos aparentes pecados arbitrales
El árbitro Fernando Hernández del partido de ida de la gran final entre Cruz Azul y América no se fue en blanco, pues su labor fue cuestionado con dureza por los especialistas arbitrales en las mesas de análisis deportivo y en redes sociales por dos jugadas que según debieron marcarse diferente o en su defecto merecían una sanción más fuerte.
La primera de las jugadas en donde el criterio del señor Hernández fue cuestionado con severidad fue la falta que cometió el portero del América Luis Malagón al minuto 6 de tiempo corrido en la primera mitad, cuando en un balón que le retrasó Jonathan Dos Santos, el arquero americanista en su afán de impedir el peligro en su meta faulea a Uriel Antuna delantero de Cruz Azul dentro del área, pisándole sobre su pie.
El árbitro no dudó en marcar la pena máxima, pero la acción disciplinaria por esa falta en aras de lo que dice el reglamento en el sentido de que falta del último hombre entre la portería y el rival es penalti, el silbante Fernando Hernández no marcó ni tarjeta amarilla contra el guardameta americanista.
Esta decisión generó polémica en redes sociales y en los programas de análisis, donde los exárbitros Felipe Ramos Rizo y Francico Chacón, quienes son especialmente severo en sus apreciaciones juzgaron como una omisión grave que el señor Fernando Hernández no haya expulsado al cancerbero de las Águilas.
Esto, aunado a las críticas y desaprobaciones que ha generado esta omisión del colegiado en redes sociales, lo ha colocado en una posición incómoda, sobre todo porque siguen cuestionando que la designación de dicho árbitro no fue la adecuada para un partido de esta envergadura.
Para colmo de males, en la segunda mitad, cuando los azulcremas tomaron el dominio de las acciones, se generó la segunda acción polémica cuando en el área celeste, el uruguayo Carlos Rodolfo Rotondi derribó al capitán americanista, Henry Martín, siendo evidente después de varias repeticiones que el defensa cruzazulino había pisado al americanista, pero tanto Fernando Hernández como la gente del VAR, dejaron pasar la acción al considerarla como accidental.
Obviamente que no se hicieron esperar los juicios en contra de la labor del citado árbitro, aumentando así la presión para el próximo domingo para el silbante que sea elegido para el juego definitivo y que se supone sea el internacional Marco Antonio Ortiz, más allá de que antes del juego de este jueves supuestamente su familia fue amenazada de muerte como presión para que haga una buena labor, sobre todo a favor de la escuadra del Cruz Azul.
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