Tres policías de Tabasco fueron asesinados al querer revisar una camioneta en la que viajaban sicarios
Un grupo de sicarios que se trasladaban del estado de Chiapas a Tabasco atacaron un retén de la policía, dejando un saldo de tres oficiales muertos, dos heridos y uno desaparecido
Los oficiales abatidos fueron despojados de sus armas de fuego por parte de los agresores. Crédito: X/@AztecaNoticias | Cortesía
En el combate a la delincuencia muchos policías caen en el cumplimiento de su deber al intentar proteger a la ciudadanía, el caso más reciente ocurrió en el municipio de Huimanguillo, Tabasco, cuando elementos trataron de frenar el paso de sicarios, el saldo fue de tres oficiales muertos, dos heridos y uno desaparecido, presuntamente secuestrado por los mismos atacantes.
Ocurrió en una zona que limita con el estado de Chiapas, en la comunidad El Limoncito. Era alrededor del mediodía cuando los policías vieron una camioneta sospechosa y le pidieron que se detuviera para hacerle una revisión de rutina, pero los sicarios abrieron fuego contra ellos.
Dos oficiales murieron dentro de su patrulla, según informó Azteca Noticias, otro más fue asesinado en la carretera. Servicios de emergencia arribaron al lugar, atendieron a los uniformados lesionados y los trasladaron a un hospital.
Los oficiales abatidos fueron identificados como Lenin Martínez Romero, Fortín Nieto Arenas y Vicente Hernández García, quienes también fueron despojados de sus armas de fuego por parte de los agresores.
La camioneta en la que viajaban varios sicarios encapuchados venía de Chiapas, un estado en el que el crimen organizado tiene amplio dominio. Tras el ataque los delincuentes siguieron su camino, y aunque se implementó un operativo para encontrarlos no han sido localizados.
De acuerdo con el diario El Heraldo de Tabasco, testigos de los hechos indicaron que las cosas ocurrieron tan rápido, que los policías no tuvieron tiempo de reaccionar ante el ataque.
Luego de la agresión, los vecinos del lugar se mantuvieron resguardados, pues aseguraron que se siguieron escuchando disparos a lo largo de la jornada. La presencia de la Guardia Nacional, el Ejército mexicano y las policías estatales de Chiapas y Tabasco les dieron tranquilidad.
En Tabasco la violencia se ha ido exacerbando en los últimos meses, y el crimen organizado ha ido avanzando por el estado. En el mes de abril medios locales reportaron la incursión del grupo Anti-Barredora, el cual combate a una facción del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG). Además, su cercanía con Chiapas lo hace proclive a que los sicarios se trasladen al lugar.
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