Consumidores resienten el nuevo impuesto a la gasolina en Los Ángeles 

Apenas terminó de llenar el tanque de gasolina de su camioneta LGX 460, Josefina Noriega se encontró con la sorpresa de que ahora tiene que pagar más de $5.00 extras, debido al nuevo impuesto ordenado por el gobernador Gavin Newsom, desde el 1 de julio. 

Josefina, al igual que miles o millones de californianos no se han dado del incremento al costo de la gasolina. 

“Ni cuenta me di cuando nos aplicaron ese golpe a nuestros bolsillos”, dijo Josefina, una exvendedora de seguros de autos. “Antes llenaba el tanque con $90.00 y ahora tengo que pagar más dinero”. 

De ello se dio cuenta, tras observar la pantalla de la máquina expendedora, en el establecimiento de la gasolinera Chevron de la intersección del bulevar Atlantic y la Avenida César Chávez, en el Este de Los Ángeles. 

En dicho establecimiento, pagar un galón de gasolina regular con tarjeta de débito o crédito cuesta $4.89; $5.09 la gasolina Extra (Plus) y $5.29 la gasolina Supreme. 

Otro golpe al bolsillo del consumidor 

Newsom ha dicho que las compañías petroleras están estafando a los californianos, aunque algunos se preguntan si el impulso del estado para lograr vehículos de cero emisiones para 2025 podría estar influyendo en los altos precios, en el estado más caro del país. 

“El gobernador quiere que todos tengan un carro eléctrico, pero al mismo tiempo se consume más electricidad, no se generan suficientes impuestos y hay menos dinero en las arcas de California”, dijo el economista Carlos Guamán. 

“Entonces, seguramente pensaron qué tal si decidimos aumentar el precio como una penalización a los que tienen carros de gasolina y recuperar el dinero que no han cobrado”, añadió. 

Guamán consideró que el impuesto a la gasolina “es una estrategia fiscal para ahorrar dinero en las cuestiones de la emisión de gases y la ecología del estado y del país, aunque para el bolsillo del consumidor es un golpe que tiene que pagar, y en eso sí que estamos mal”. 

La lucha contra las industrias petroleras 

En marzo de 2023, en una sesión especial, el gobernador firmó ley SBx1-2, escrita por la senadora estatal Nancy Skinner (D-Berkeley), copatrocinada por el fiscal general del estado, Rob Bonta y aprobada por una supermayoría tanto en el Senado como en la Asamblea Estatal. La ley entró en vigor el 26 de junio 

“California se enfrentó a las grandes petroleras y ganó”, dijo Newsom en aquel momento, luego de aumentos récord en el precio de la gasolina y ganancias multimillonarias de las compañías petroleras y teniendo como objetivo controlar a esas industrias. 

La ley SBx1-2 también creó una división independiente para monitorear los mercados petroleros y detectar posibles manipulaciones del mercado por parte de las compañías petroleras y autoriza a la Comisión de Energía de California (CEC) a crear una sanción para responsabilizar a la industria petrolera si se presentan aumentos excesivos del precio del gas. 

“De alguna manera estamos mejor que hace unos años cuando pagábamos hasta casi $7.00 [en septiembre de 2022] por galón”, dijo Josefina Noriega. “En esos días pagaba entre $115 y 120 para llenar el tanque… todo ha subido de precio, menos los sueldos”. 

Darrell Jackson es otro conductor que dijo sentirse “asfixiado” por tantos impuestos en California. 

Ahora que el impuesto estatal a la gasolina es de 60 centavos -mientras que entre julio de 2023 y junio de 2024 era de 58 centavos-, según el Departamento de Administración y Tasas de California (CDTFA), a Jackson, de 58 años no le quedó más remedio que cargar el tanque de su Ford Escort 1994 con ¡$3.46! de gasolina. Era todo lo que tenía en efectivo. Apenas le alcanzó para un poco más de medio galón. 

“Ignoraba que tendría que pagar más dinero por la gasolina”, dijo el hombre afroamericano, frente a una gasolinera Shell donde cada galón costaba centavos menos que en la Chevron ubicada a menos de 15 metros de distancia. 

“Con estos impuestos ya solamente falta que nos quiten el pan de la boca y nos quieran matar de hambre”, criticó el hombre. “Ellos, el gobierno y las compañías regulan los impuestos y los precios como quieren”, dijo Jackson, a La Opinión 

Gasolina más barata en otros estados 

Además del nuevo impuesto implementado por el gobernador Newsom, se le debe sumar el impuesto sobre las ventas, y el impuesto federal sobre el combustible, que actualmente es de 18 centavos. 

“Mi hermano dice que en Arizona el galón de gasolina está a casi $1.25 menos que en California”, dijo Josefina Noriega, mientras ponía gasolina a su camioneta LGX 460 y hablaba por teléfono con él. 

En efecto, el precio promedio de la gasolina en Arizona es $1.23 más barato que en el “Estado Dorado, pero allá pagan solamente 53 centavos menos es impuestos especiales estatales. 

“Tengo que trabajar 61 horas cada semana para poder sobrevivir”, dijo Gladys Escobar, una mujer de origen salvadoreño que cuida ancianos. “Ando de un lado para otro en el carro y la verdad es que el dinero ya no alcanza para pagar ni siquiera la renta”. 

Ella, a sus 64 años, cuida personas mayores para el condado y para una compañía privada. 

De igual manera se expresaron Alberto Lorenzana, de 34 años, nacido en Santa Ana, El Salvador, y su amiga costarricense, Génesis Monge, de 27 años. 

“La gasolina más barata la encuentra uno en Costco, pero hay que tener la membrecía”, dijo Alberto.  

En efecto, en Costco de Monterey Park, el galón de gasolina regular estaba a $4.09 y la Premium a $4.39, según GasBuddy.com 

“Con todo tan caro, ya ni siquiera puedo pagar los $2,000 de alquiler de un apartamento chico”, declaró Génesis. “Y, con estos nuevos impuestos, ¿A dónde vamos a parar?”. 

 Gasolina más cara del país 

 Según el Departamento de Transportación de California, el impuesto especial a la gasolina paga el 80% de las reparaciones de carreteras y caminos.  

Pero, en promedio cada californiano paga aproximadamente $300 anuales en impuestos estatales sobre la gasolina. 

Así, en el primer trimestre de 2024, el combustible para vehículos representó el 3.5% de los ingresos fiscales del estado, es decir, casi $2,200 millones. 

“Mi Astro Van se llena con $70”, dijo Inocencia Fernández, propietaria de la tienda de abarrotes Cali-Dólar. “No me he fijado en la diferencia desde el 1 de julio, pero siento que voy a tener que pagar más”. 

“Yo pago lo que sea necesario para ayudar al medioambiente”, comentó Roberto Villar, un hombre jubilado, mientras que el iraní Nima Hos manifestó que el precio del galón de gasolina en la tienda Seven-Eleven ($4.49 la gasolina regular y $4.99 la Premium) – esquina de los bulevares Montebello y San Gabriel, en la ciudad de Rosemead- era un poco más barata que en Arcadia, la ciudad donde él vive. 

Para el economista Carlos Guamán, la seguidilla de impuestos podría provocar que se incremente el éxodo de residentes de California hacia otros estados donde el costo de vida sea más barato. 

“Vamos a llegar al punto de pensar dos veces si vale la pena seguir viviendo en California, a pesar de que aquí tenemos buen clima y quizás las mejores fuentes de empleo”, subrayó. 

“Pero también hay oportunidades en otros estados como Nebraska o en Indianápolis (Indiana), a donde regularmente la gente no se va, y en donde pueden vivir en una casa más grande y los hijos están en mejores escuelas, viven más tranquilos y mejor, y no hay tantos desamparados como en California, y particularmente en Los Ángeles”. 

De acuerdo con Ycharts.com, el precio minorista del gas a nivel nacional se encuentra en $3.60 el galón frente a $3.5 la semana pasada, y por debajo de los $3.64 del año pasado, es decir, en California se cobra un promedio de $1.30 más por cada galón.