Cárteles pagan 150 dólares a adolescentes para cruzar droga a Estados Unidos

Varios adolescentes han sido detenidos en la frontera entre EE.UU. y México intentando cruzar droga, y uno de los casos resultó con la muerte del menor

Decomiso de cocaína

Cada vez más jóvenes son usados por el narco para traficar drogas por la frontera. Crédito: Martin Mejia | AP

La necesidad o el poder ganar dinero “fácil” seduce a muchos jóvenes que caen en las garras del crimen organizado, los cárteles usan a adolescentes para cruzar droga a Estados Unidos pagándoles 150 dólares y viéndolos como algo desechable, pues no les importa su seguridad en los más mínimo.

La Patrulla Fronteriza ha reportado varios casos, lo que permite ver el modus operandi de los grupos criminales, que incluso ya costó la vida de un adolescente de 16 años, una situación que puso al descubierto la poca importancia que estas personas tienen tanto para quienes los contratan, como para las autoridades.

Un reportaje del diario Milenio detalla esta situación, documentando algunos de los casos que involucran a menores de edad en el trasiego de drogas de México a EE.UU., los cuales rastreó desde hace cinco años y sumaron 28.

Uno de esos casos fue el de Marcelino, un menor de 16 años quien murió al traficar la droga. El joven estaba esperando cruzar desde Tijuana a Estados Unidos, la droga la llevaba en dos botellas de lo que dijo era jugo de manzana y lo usaría para sofocar el calor en el tiempo de espera.

Pero se topó con una revisión de agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP), quienes le dijeron que seguramente era droga lo que llevaba en las botellas, incluso uno de ellos la vació sobre la mesa esperando que se evaporara y dejara cristales, prueba de que eran anfetaminas.

No ocurrió de inmediato, le hicieron beber un gran sorbo y el joven empezó a sentirse mal, duró algunas horas así, hasta que finalmente llamaron a los paramédicos, pero murió de un paro cardiaco.

Los otros casos

En el caso de Marcelino, el intento de cruce se hizo a la vieja usanza, escondiendo la droga en lo que parecería ser un objeto común, para beber, pero en otros casos los narcotraficantes buscan aprovechar el conocimiento de los jóvenes en tecnología para que hagan el trabajo sucio.

En otro de los casos, un joven de 16 años usó un carrito de control remoto para pasar la droga por la frontera, el trabajo le parecía fácil y divertido, pero todo cambió cuando agentes de la Patrulla Fronteriza en San Diego lo descubrieron, al detenerlo vieron que tenía 50 paquetes de metanfetaminas.

En Yuma, Arizona, fue descubierto un adolescente de 17 años que recibía y enviaba paquetes desde la frontera mediante el uso de un dron, el trabajo terminó cuando fue descubierto.

De todos los casos sólo uno correspondía a una mujer, ella también era una asdolescente, quiso entrar a EE.UU. por El Paso, Texas, llevaba con ella una especie de altavoz, pero en su entrevista los oficiales no creyeron su historia. Un perro entrenado la descubrió al rastrear droga en el aparato, y al abrirlo vieron que tenía tres paquetes de metanfetamina.

Pero no son las únicas modalidades que usan los jóvenes, algunos portaban drogas en sus tenis, en juguetes o carritos; otros entre la ropa pegada al cuerpo o en distintos artículos a través de los cuales los adolescentes aceptaron cooperar.

Los narcotraficantes suelen usar adolescentes pues son fáciles de convencer, además los engañan diciéndoles que en caso de ser detenidos no pasará nada debido a que son menores de edad, pero al final son abandonados a su suerte.

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