Hallan restos de periodista asesinado por policías municipales de Taxco

El periodista Enrique Hernández Avilez desapareció el pasado 21 de junio cuando fue detenido por agentes de tránsito mientras conducía su taxi, que era su segunda fuente de trabajo.

Desde entonces no se sabia su paradero hasta que sus restos fueron hallados en una fosa clandestina en el municipio de Taxco, Guerrero, una de las zonas más violentas de este estado.

El hallazgo de la víctima se dio gracias a la captura previa de 5 agentes de la policía de Taxco, así como del subdirector de dicha corporación, quienes eran sospechosos del crimen y de haber enterrado el cuerpo en una fosa.

Así lo reveló en su momento el editor de la revista Contacto Policiaco, Martin Vázquez López, quien señaló que la policía y operadores de grúas estaban involucrados con esta desaparición.

Luego de que autoridades estatales y federales intervinieran la Policía Municipal de Taxco, debido a la gran cantidad de reportes que señalaban su presunta participación en diversos delitos, principalmente desaparición de personas, se logró ubicar múltiples fosas clandestinas, y en una de ellas los restos del periodista.

Asimismo, se incautaron fotografías que muestran el momento en que los agentes municipales cavan las fosas clandestinas, las cuales eran enviadas a su jefe para confirmar que habían cumplido con sus instrucciones.

Zona roja para periodistas

En la audiencia inicial realizada el pasado 31 de agosto, una jueza dictó prisión preventiva para los seis oficiales detenidos, por lo que permanecerán recluidos en el penal de Iguala mientras continúan las investigaciones.

Durante el gobierno del presidente López Obrador, cinco periodistas han sido asesinados en Guerrero, y a esta lista se suma Enrique Hernández Avilez.

Además de estos crímenes, se han registrado ataques contra cuatro reporteros de Chilpancingo y otros dos de Acapulco, todos con disparos de arma de fuego, según informó el diario El Sol de México.

Asimismo, a la lista de agresiones a periodistas se suma el secuestro masivo de comunicadores y sus familias en Taxco, donde cinco personas fueron levantadas, tres de ellas reporteros y después regresadas a sus casas, pero bajo amenaza de no volver a ejercer su profesión.

Otro secuestro masivo de comunicadores se registró en la región de Tierra Caliente, donde los periodistas regresaron y sólo el administrador de un portal sigue desaparecido.

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