Autoridades de California anuncian disminución en la mortalidad producida por armas de fuego

El estado ha experimentado una disminución del 23% en las recuperaciones de armas fantasma

Rob Bonta, fiscal de California, en conferencia de prensa.

Rob Bonta, fiscal de California, en conferencia de prensa.  Crédito: Jorge Luis Macías | Impremedia

El número de armas fantasma usadas en crímenes ha disminuido desde la pandemia de Covid-19, muestra un nuevo reporte de la Oficina de Armas de Fuego del Departamento de Justicia de California (OGVP).

El Departamento de Justicia de California publicó un informe titulado “La lucha de California contra la crisis de las armas fantasma: avances y nuevos desafíos”, destacando avances significativos en la lucha contra las armas fantasma a través de litigios, legislación y cambios de políticas.

El informe presentado por el fiscal estatal, Rob Bonta, muestra un aumento del 600% en las recuperaciones de armas fantasma de 2019 a 2021, con un aumento del 1,236 % en los casos de violencia doméstica.

En rueda de prensa hace unos días, Bonta dio a conocer el caso de un hombre de San José que fue arrestado por violencia doméstica, tras amenazar a su victimas con un arma fantasma.

En el informe, datos estadísticos señalan que, en 2020, las autoridades recobraron 5,490 armas fantasma; 10,877 en 2021; 10,098 en 2022 y 8,340 en 2023.

El fiscal estatal resaltó que, desde junio de 2022, California ha experimentado una disminución del 23% en las recuperaciones de armas fantasma.

El informe revelado por el fiscal enfatiza también la necesidad de seguir actuando en contra de las armas fantasma, incluyendo la aplicación de nuevas leyes dirigidas contra las armas impresas en tercera dimensión.

“Cuando se trata de la violencia armada, California es un modelo de lo que es posible lograr a través de acciones de sentido común”, dijo Bonta.

“Hace 30 años teníamos una de las tasas de mortalidad por armas de fuego más altas del país; hoy tenemos una de las tasas de mortalidad por armas de fuego más bajas del país”.

En el informe de la OGVP se resaltan los esfuerzos estatales para abordar la amenaza de las armas fantasma.

Bonta describió que dichas armas son producidas por personas sin licencia, a partir de productos vendidos sin verificación de antecedentes, números de serie, registros de venta u otras protecciones de seguridad.

Sanciones económicas a empresas

En el informe se menciona que documentos judiciales indican que, en el lapso de aproximadamente seis años, una sola compañía de armas fantasma vendió más de 200,000 kits de armas fantasma no serializados en California antes de que los litigios y las reformas legislativas les impidieran vender más.

En junio de este año, el fiscal general de California, Rob Bonta, y la fiscal de distrito de San Francisco, Brooke Jenkins, quienes contaron con la asistencia de abogados voluntarios del Giffords Law Center to Prevent Gun Violence y Keker, Van Nest & Peters, LLP, anunciaron que se dictaron sentencias definitivas contra las compañías Blackhawk Manufacturing. (Blackhawk), GS Performance LLC (Glockstore) y MDX Corporation (MDX) como parte de un acuerdo.

De conformidad con las sentencias, a las empresas se les prohibió permanentemente fabricar o vender kits de armas fantasma no serializados y piezas de precursores de armas de fuego en California.

Las piezas precursoras de armas de fuego son elementos que pueden convertirse fácilmente en un armazón o receptor de arma de fuego, o que se comercializan como tales.

Las empresas también pagarán sanciones civiles: 500,000 dólares de Blackhawk, 120,000 dólares de Glockstore y 55,000 dólares de MDX. Las sentencias resuelven acusaciones de que las empresas violaron las leyes federales y de California en la fabricación, publicidad y venta de kits de armas fantasma y piezas de precursores de armas de fuego. 

Los datos del informe muestran que California se vio especialmente afectada por la crisis de las armas fantasma.

De hecho, entre 2017 y 2021, el “Estado Dorado” representó el 12% de todas las armas recuperadas de delitos en todo el país y rastreadas por la Oficina federal de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos (ATF).

Asimismo, California representó el 55% de las armas de fuego reportadas a la ATF que fueron identificadas como armas fantasma.

Un caso decisivo en la Corte Suprema

Mike McLively, director de políticas del Centro Giffords para la Intervención contra la Violencia, manifestó que el estado de California ha trabajado “incansablemente” para abordar “la  epidemia de violencia armada en Estados Unidos”.

McLively destacó que California es un modelo para el resto. de la nación, porque hace tres décadas tenía la tercera tasa más alta de homicidios por armas de fuego en todo el país y la 16.ª tasa más alta de mortalidad general por armas de fuego.

“Ahora tenemos la séptima tasa de muertes por armas de fuego más baja del país, y significativamente más baja que en estados como Texas y Florida”, subrayó, considerando la disposición y la voluntad de los lideres estatales de examinar las tendencias, observar los datos y tomar medidas innovadoras para estar al frente de la lucha contra las armas, particularmente las armas fantasma, que son casi imposibles de rastrear.

El experto del Centro Giffords manifestó que la próxima semana la Corte Suprema de Estados Unidos escuchará el caso Garland v. VanDerStok, referente a una impugnación de la regla federal de la ATF que regula las armas fantasma.

“Si finalmente se anula, lo cual es completamente posible, dada la naturaleza bastante extremista de la Corte Suprema que tenemos en este momento, será más importante que nunca que nuestros líderes estatales, incluido el fiscal general Rob Bonta, el gobernador Gavin Newsom y nuestros líderes en la legislatura de California, sigan liderando el camino en este tema y dando ejemplo al resto del país”, expuso Mike McLively.

Cierra el mayor productor de kits

Por su parte, Krystal LoPilato, asesora principal de políticas de Everytown for Gun Safety, la organización más grande de los Estados Unidos para la prevención de las armas indicó que el análisis “La lucha de California contra la crisis de las armas fantasma: avances y nuevos desafíos”, es una lectura obligada para cualquier estado interesado en proteger a las comunidades de una industria que intenta eludir las leyes de seguridad de armas para su propio beneficio financiero”.

LoPilato recordó que hace apenas un mes, el mayor productor de kits y componentes de armas fantasma del país cerró su negocio, “lo que esencialmente demuestra que su modelo de negocio no era compatible con el nivel de desafíos legales presentados después de que se promulgaron las regulaciones sobre armas fantasma inteligentes”.

En efecto, la compañía Polymer 80 de Nueva York, permitía a las personas, – incluidas aquellas a las que se les prohíbe poseer armas de fuego- construir armas fantasma no serializadas e imposibles de rastrear que han sido parte de crisis de violencia armada en Estados Unidos durante los últimos años.

¿Qué son los kits de armas fantasma?

Los kits se pueden usar para ensamblar un arma completamente funcional en menos de 30 minutos y generalmente se venden sin número de serie ni verificación de antecedentes.

Como resultado, las personas a las que se les prohíbe legalmente comprar o poseer armas de fuego podrían obtener armas fantasma.

La falta de números de serie en estas armas de fuego también las hace esencialmente imposibles de rastrear, lo que las hace atractivas para los delincuentes y obstaculiza la capacidad de las fuerzas del orden para prevenir y resolver delitos.

Según datos informados por la Oficina de Armas de Fuego del Departamento de Justicia de California, la cantidad de armas fantasma recuperadas por las fuerzas del orden en California aumentó en más de un 49,000% de 2015 a 2021.

Fuente: Oficina del fiscal estatal de California, Rob Bonta.

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