Estudio muestra beneficios a largo plazo de la cirugía para perder peso en jóvenes
La cirugía bariátrica en adolescentes con obesidad severa muestra beneficios duraderos, como una pérdida de peso sostenida y una disminución de comorbilidades
Las cirugías metabólicas y bariátricas que alteran partes del estómago y los intestinos. Crédito: Valente Romero | Shutterstock
Un estudio a largo plazo, respaldado por el Instituto Nacional de Diabetes y Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK) del NIH, revela que los jóvenes que se someten a cirugía bariátrica a los 19 años o menos experimentan beneficios de salud sostenidos durante al menos una década después de la intervención.
El estudio, conocido como Evaluación Longitudinal de Cirugía Bariátrica para Adolescentes (Teen LABS), muestra que estos pacientes no solo logran una pérdida de peso duradera, sino que también observan una reducción considerable en diversas comorbilidades asociadas con la obesidad.
Los participantes del estudio, con una edad promedio de 17 años, se sometieron a dos tipos de cirugía bariátrica: el bypass gástrico o la gastrectomía en manga, procedimientos cada vez más comunes en el tratamiento de la obesidad severa. Diez años después de las cirugías, los pacientes mantuvieron una reducción promedio del 20 % en su índice de masa corporal (IMC), lo que respalda la efectividad duradera de estos tratamientos quirúrgicos en adolescentes.
En términos de comorbilidades, el estudio destaca importantes reducciones en afecciones que normalmente afectan a adultos mayores, como la diabetes tipo 2 y la hipertensión, que en jóvenes tienden a avanzar con mayor rapidez y gravedad.
En aquellos jóvenes que se sometieron a la cirugía, la incidencia de diabetes tipo 2 disminuyó en un 55 %, una cifra que contrasta notablemente con la reducción observada en estudios de adultos.
De hecho, la misma cirugía aplicada en adultos mostró una reducción de solo el 18 % de la diabetes tipo 2 a los siete años, y del 12,7 % a los doce años, lo que sugiere un impacto significativamente mayor en los adolescentes operados. Además, los jóvenes también mostraron una disminución del 57 % en la hipertensión y del 54 % en los niveles de colesterol anormal, factores que son cruciales para la prevención de enfermedades cardiovasculares.
La cirugía bariátrica en adolescentes ha sido objeto de numerosos debates médicos y éticos, ya que la intervención se plantea en edades en que los pacientes aún están en desarrollo. Sin embargo, los resultados de Teen LABS parecen indicar que estos beneficios pueden justificar la intervención temprana en casos de obesidad severa.
Obesidad en jóvenes sigue en aumento
Además, el estudio ha despertado un interés especial en la comunidad médica, ya que la obesidad en jóvenes sigue siendo una crisis de salud pública que, según expertos, requiere de estrategias robustas y a largo plazo.
Los efectos de la cirugía bariátrica en adolescentes pueden ser determinantes para prevenir un cúmulo de complicaciones futuras. La diabetes tipo 2, por ejemplo, tiende a progresar más rápidamente en personas jóvenes que en adultos, lo que aumenta las posibilidades de complicaciones graves a una edad temprana. La efectividad de la cirugía para prevenir el avance de esta enfermedad en los jóvenes sugiere una ventaja única de la intervención en esta población.
Para llevar a cabo el estudio Teen LABS, el NIDDK destinó importantes recursos a la investigación. Las subvenciones DK072493, DK072493, DK095710 y fondos del Centro Nacional de Recursos de Investigación del NIH permitieron que el equipo siguiera a los participantes durante una década, recopilando datos detallados sobre los resultados de salud física y metabólica tras la cirugía.
Los datos obtenidos de esta investigación son accesibles a través del Repositorio Central del NIDDK, lo que facilita su consulta para futuros estudios y para el diseño de políticas de salud pública orientadas a tratar la obesidad en jóvenes.
En la comunidad médica, los hallazgos de Teen LABS han abierto una discusión acerca de la necesidad de cambiar las perspectivas y los protocolos actuales en cuanto al manejo de la obesidad infantil y juvenil.
En lugar de depender exclusivamente de cambios en el estilo de vida, que pueden ser difíciles de implementar y sostener en esta población, la cirugía bariátrica se perfila como una herramienta potencialmente viable y eficaz para combatir la obesidad severa.
La cirugía de pérdida de peso, especialmente si se realiza antes de que las enfermedades relacionadas con la obesidad avancen, podría significar la diferencia entre una vida de complicaciones de salud y una trayectoria más saludable.
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