‘Tacos del Tigre’, no deja que la gente se vaya con el estómago vacío
Omar Reyes siente mucho orgullo en lo que hace y no cierra hasta que atiende al último cliente
Una fila de no más de 5 personas esperan a Natividad Méndez y su hijo Omar Reyes, mientras preparan un surtido de carnes antes de abrir ‘Tacos del Tigre’ cerca de la esquina de las calles Humboldt y Ave 26 en Lincoln Heights, en Los Ángeles
En una fría noche de jueves, Reyes se encarga de preparar las carnes de suadero, asada, pastor, buche, cabeza, pollo y tripa; mientras su madre prepara el cazo donde cosen la comida con manteca y otros condimentos.
Después de tomar la primera orden, Reyes lanza un chapoteo de manteca con su espátula a la parrilla plana, hecha la carne y las tortillas, corta la carne, prepara un plato donde coloca las tortillas y finalmente lanza los pedazos de carne con la delicadeza de un pintor y la precisión de un cirujano.
De acuerdo con Reyes, trabaja seis días a la semana, pero el viernes, sábado y domingo le llegan tantos clientes que cierra hasta las tres de la mañana.
“Como dice Vicente Fernández ‘Hasta que la gente deje de aplaudir, dejó de cantar’, así igual aquí a veces se pasan del horario, pero aprovechamos para seguir sirviendo porque no me gusta que la gente se vaya sin comer”, dijo Reyes, con escasos 20 años de edad.
El nombre del negocio viene del apodo que el padre de Reyes, César Reyes, le dio cuando era un niño.
“A mí me decían ‘el Tigre’ porque me gustaba vestirme mucho del personaje de Tigger de Winnie Pooh… Siempre que íbamos para Disneylandia me maquillaban, me pintaban así la cara de tigre y se me quedó”, dijo Reyes sobre el nombre del negocio.
Recién llegada de Oaxaca, Méndez conoció al padre de sus hijos, César Reyes, en un puesto de tacos donde ambos trabajaban hace 26 años en Los Ángeles.
De acuerdo con Méndez, de 54 años de edad, César Reyes ya tenía experiencia trabajando en taquerías en Puebla, así que aprendió mucho del negocio junto a él.
“Yo no sabía nada de esto, la verdad, empecé aquí con el papá de mis hijos”, explica. “Él fue el que me enseñó a trabajar de esta forma con la comida”.
Solo un año después comenzó un negocio con César Reyes, ahora su exmarido, quien es dueño de la taquería ‘Ave 26’ con su hija, mientras que Méndez y su hijo se han encargado de los ‘Tacos del Tigre’.
Cuando Reyes tenía 12 años empezó a ayudarle a su padre cobrando a los clientes, sirviendo bebidas y un poco de la preparación de comida.
“Siempre le pedí a mi papá que me dejara trabajar con él o si no, me iba con mi mamá”, dijo el joven emprendedor. “Esto siempre me ha gustado porque ganaba unos $20 de la propina que me daban”.
Como principiante, Reyes se acuerda de las quemadas que se daba a voltear las tortillas, pero ha mejorado, dice, y algo que antes le tomaba un minuto, ahora le toma 30 segundos.
Aunque trabaja con una gran velocidad, imposible de emular para cualquier mortal que no trabaja en el negocio, dice que siempre busca mejorar y aprender lo más que él pueda.
Hoy en día la familia tiene dos puestos de tacos, con el segundo negocio cerca del parque Cypress en la Ave 27. No obstante, los retos no faltan.
Reyes explicó que en algunas ocasiones Salubridad ha venido a tirar la comida, lo que resulta en grandes pérdidas para la familia.
“Si se llevan todo, estás hablando como de unos 10,000 dólares”, subraya Méndez.
Eso incluiría: la basura, el tanque de gas, carnes, salsa, bebidas y las mesas, entre otras cosas.
Reyes siente mucho orgullo de lo que hace, principalmente por lo que representa para él y para su madre.
“Estoy trabajando para algo que se me va a quedar para mi futuro”, expresa Reyes. “Además, me gusta echarle la mano a mi madre para que puede descansar más días”.
Horarios
‘Tacos del Tigre’está abierto en la Ave 26 y la calle Humboldt de domingo a jueves de 5 p.m. a 1:30 a.m., mientras que los viernes y sábados de 5 p.m. a 2:30 a.m. El puesto en el parque Cypress abre de domingo a jueves de 4 p.m. a 12:30 a.m. y los viernes y sábados de 4 p.m. a 1:30 p.m.