Sentencian a exlíder de los Zetas vinculado a la masacre de 72 migrantes en Tamaulipas
Martín Omar Estrada Luna, alias “El Kilo”, era el principal operador de varias masacres de migrantes en Tamaulipas y fue sentenciado a 73 años de prisión
Hace más de 14 años un terrible hallazgo reveló el infierno por el que pasan los migrantes que cruzan el territorio mexicano en busca del “sueño americano”, y en donde muchos de ellos encuentran la muerte.
Fue en el municipio de San Fernando, Tamaulipas, donde se descubrieron los cuerpos de 72 personas (58 hombres y 14 mujeres) provenientes de Honduras, El Salvador, Guatemala, Ecuador y Brasil.
Las víctimas fueron secuestradas y asesinadas al no pagar lo exigido por su rescate y negarse a formar parte del cártel de Los Zetas.
Ahora, más de una década después, un juez federal condenó a tres integrantes de dicho cártel que participaron en la masacre, incluyendo a uno de los líderes del grupo criminal.
La Fiscalía General de la República (FGR) dio a conocer las sentencias, que incluyen 73 años y tres meses de cárcel contra Martín Omar Estrada Luna, alias “El Kilo”, detenido en abril de 2011 y señalado como el principal operador de varias matanzas de migrantes en Tamaulipas.
Según medios mexicanos como el diario Reforma, “El Kilo” era el jefe de plaza de Los Zetas y vivió varios años de su juventud en Estados Unidos, de donde fue deportado tras cometer múltiples delitos; una vez que se instaló en San Fernando asumió control de la localidad, poniendo en su nómina a la mayoría de los policías municipales.
También fueron sentenciados Ramón Palomo Rincones, alias “El Coyote”, a 82 años con nueve meses de prisión, y Juvenal Burciaga Venegas, alias “El Alacrán”, quien recibió condena de 76 años por los delitos de delincuencia organizada, secuestro con agravantes y corrupción de menores.
“De acuerdo con la indagatoria, dicha pena se deriva de los hechos ocurridos en San Fernando, Tamaulipas, en agosto de 2010, donde personas de diversas nacionalidades fueron ejecutadas por miembros de una organización delictiva y quienes posteriormente fueron localizadas dentro de una bodega en dicho municipio”, indicó la FGR.
Tras las primeras investigaciones sobre ese caso, se supo que los migrantes fueron bajados de autobuses, torturados para confesar si trabajaban para el Cártel del Golfo, en esa época enemigo de Los Zetas, y ejecutados luego de negarse a trabajar para sus captores.
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