Proponen en Oklahoma exigirles a los estudiantes prueba de ciudadanía o de estatus migratorio
El superintendente de Instrucción Pública de Oklahoma propone exigirles a los estudiantes una prueba de ciudadanía o de estatus migratorio
La pesada carga educativa puede afectar a los niños. Crédito: LM Otero | AP
Ryan Walters, jefe de educación en Oklahoma, presentó una propuesta para que a los estudiantes se les solicite presentar una prueba de ciudadanía o de su estatus migratorio.
Alineándose a la política establecida por Donald Trump para erradicar al fenómeno migratorio, el superintendente estatal republicano no sólo está dispuesto a permitir que agentes federales del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas ingresen a las escuelas de Oklahoma, sino que plantea la necesidad de llevar un control sobre la cantidad de estudiantes hijos de inmigrantes, pero sobre todo de su estatus legal en Unión Americana.
“Las escuelas están paralizadas por la avalancha de inmigrantes ilegales y la política de apertura de fronteras de Biden/Harris.
Los habitantes de Oklahoma y el país eligieron al presidente Trump y haremos todo lo posible para ayudar a poner a los estudiantes de Oklahoma en primer lugar”, señaló.
En caso de que los progenitores de los estudiantes estén viviendo en el país sin la documentación necesaria para acreditar su estancia, eso no implica que se les niegue acceso a la educación.
De hecho, una decisión emitida por la Corte Suprema de 1982, conocida como Plyler v. Doe, determinó que es inconstitucional negarles a los niños una educación en función de su estatus migratorio.
Arturo Alonso-Sandoval, miembro de la Cámara de Representantes de Oklahoma por el distrito 89, dio conocer frente a algunos medios informativos que algunas familias de inmigrantes tienen miedo de ser arrestadas y por ello evalúan la posibilidad de que sus hijos dejen temporalmente de asistir a clases.
“La comunidad está asustada. Las conversaciones que he tenido con los padres me han demostrado que lo único que están haciendo es intentar ofrecerles la mejor oportunidad a sus hijos, como cualquier padre. Están empezando a preguntarse: ‘¿debo dar de baja a mi hijo de la escuela?’” indicó el demócrata de 26 años.
La propuesta presentada por el jefe de educación en Oklahoma inicialmente debe ser aprobada por la junta de educación estatal.
Después, tendría que ser analizada por los legisladores para someterse a una votación y, en caso de ser así, al final John Kevin Stitt, gobernador republicano, es quien le daría luz verde o la rechazaría.
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