Donald Trump está considerando comprar aeronaves usadas para reemplazar al avión presidencial
El presidente considera reemplazar con aviones de segunda mano a las dos aeronaves en que suele viajar y a las cuales se les conoce como Air Force One
Donald Trump está cansado de esperar a que Boeing le entregue dos aviones nuevos para reemplazar a los Air Force One y ya busca alternativas. Crédito: Mark Schiefelbein | AP
El presidente Donald Trump está decidido a reemplazar a los Air Force One en el que suele viajar para cumplir con sus tareas al frente del gobierno, pero debido a la imposibilidad de encontrar un aviones nuevos equipados con todo lo necesario para garantizar su seguridad, contempla la opción de comprar al menos una aeronave de segunda mano.
Los dos imponentes Air Force One que en sus más de tres décadas de fabricación han trasladado a los expresidentes Bill Clinton, George W. Bush, Barack Obama y Joe Biden, ya no le agradan Donald Trump y considera reemplazarlos.
Sin embargo, el republicano de 78 años está desesperado debido a que Boeing, la compañía encargada de diseñar y fabricar las aeronaves requeridas por el gobierno estadounidense, se encuentra muy atrasada en sus procesos de ensamble, al grado de ya haber perdido miles de millones de dólares en el acuerdo de compra establecido con el propio Trump durante su primer mandato al frente de la Casa Blanca.
El principal problema del fabricante estadounidense radica en cumplir con todo el alto nivel de seguridad que demanda el proyecto.
Una de, entre muchas características específicas que deberían cumplir los nuevos Air Force One, es garantizar su capacidad de reabastecimiento en pleno vuelo.
Otro punto hasta hoy no resuelto tiene que ver con los equipos de comunicaciones altamente clasificados para instalar en los aviones presidenciales, así como mejoras de capacidad de supervivencia para hacerle frente a una variedad de contingencias.
De acuerdo con la Fuerza Aérea de Estados Unidos, el contrato establecido con Boeing indicaba que la primera aeronave debía ser entregada en 2024, pero el plazo se extendió hasta 2027.
Dicha situación le resulta muy incómoda a Donald Trump y por ello, quizá a manera de presión, abrió la posibilidad de comprar un avión usado al que se le pueda equipar con todo lo necesario para viajar de manera segura.
“Estamos buscando alternativas, porque Boeing está tardando demasiado. Podríamos ir a comprar un avión para transformarlo”, expresó.
De hecho, durante el fin de semana pasado, el presidente ya le echó un vistazo a un avión privado de 13 años que había sido propiedad de la familia real qatarí.
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