La Corte Suprema ordena nuevo juicio para un preso sentenciado a muerte de Oklahoma

Richard Glossip, preso sentenciado a muerte de Oklahoma, tendrá otra opción para tratar de eludir la pena capital, esto luego de que la Corte Suprema ordenó realizar un nuevo juicio con relación a su caso.

El sujeto en cuestión fue condenado por el asesinato del dueño de un motel donde trabajaba, en 1997. Desde entonces, ha visto pasar nueve fechas de ejecución.

En 2015, compareció ante la Corte Suprema con el objetivo de impugnar su ejecución basándose en la Octava Enmienda, pero el intento fracasó. Sin embargo, su ejecución se ha detenido en varias ocasiones.

Bajo el argumento de que durante su juicio las autoridades  cometieron varios errores que incidieron en el veredicto del jurado para declararlo culpable, Gentner Drummond, fiscal general republicano de Oklahoma, pidió anular su condena y concederle un nuevo juicio.

Durante los cerca de 25 años que Richard Glossip lleva en el corredor de la muerte siempre ha negado cualquier responsabilidad en el asesinato de quien el propietario de establecimiento donde trabajaba.

Cabe señalar que una solicitud de clemencia presentada por el fiscal Drummond a la Junta de Libertad Condicional y Perdón de Oklahoma tampoco encontró respaldo para invalidar la ejecución del preso.

Repentinamente, en mayo de 2023, el tribunal acordó pausar todo para volver a analizar el caso del condenado.

Bajo esa perspectiva y luego de una minuciosa revisión, el Tribunal Superior falló 5-3 a favor de Glossip y revocó una decisión del Tribunal de Apelaciones Penales de Oklahoma a través de la cual ya se había confirmado la condena y sentencia de muerte.

Aunque el juez Neil Gorsuch decidió no participar en la deliberación, acompañada por John Roberts, presidente del Tribunal Supremo, y por los jueces Elena Kagan, Brett Kavanaugh y Ketanji Brown Jackson, la magistrada Sonia Sotomayor emitió la determinación de la Corte para llevar a cabo un nuevo juicio donde se defina el destino final de Richard Glossip, quien en tres ocasiones ha recibido la “última comida” que el estado suele brindarles a los presos horas antes de morir para saldar su deuda con la justicia.

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