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Las ceras derretidas perfumadas emiten nanopartículas perjudiciales

Aunque las ceras perfumadas puedan parecer una opción más segura para los amantes de las fragancias, el estudio demuestra que no están exentas de riesgos

Las ceras derretidas perfumadas emiten nanopartículas perjudiciales

Las nanopartículas generadas durante este proceso son tan pequeñas que pueden viajar a través de las vías respiratorias hasta los pulmones, el cerebro y otros órganos. Crédito: Shutterstock

Las ceras perfumadas, comúnmente promocionadas como alternativas más seguras a las velas de aromaterapia o el incienso, pueden no ser tan inofensivas como se pensaba.

Un reciente estudio publicado en Environmental Science & Technology Letters ha revelado que, al igual que las velas tradicionales y los motores diésel, las ceras perfumadas emiten nanopartículas contaminantes.

Esta investigación, que evalúa los efectos de las ceras perfumadas en interiores, pone en duda la percepción de su seguridad y sugiere que su uso podría exponer a los usuarios a riesgos respiratorios.

Las velas de cera de soja, un tipo popular de cera perfumada, son promocionadas por sus beneficios como una opción más limpia, libre de humo y no tóxica. A diferencia de las velas tradicionales, estas no requieren de combustión, lo que las hace atractivas para quienes buscan evitar los riesgos del humo y las toxinas.

Sin embargo, el estudio destaca que, aunque no se queman, las velas de cera de soja liberan compuestos orgánicos volátiles (COV) en concentraciones significativas. Los COV, como los monoterpenos, son una fuente principal de contaminación en interiores. Estos compuestos reaccionan con el ozono presente en el aire, lo que provoca la formación de nuevas nanopartículas que pueden ser perjudiciales para la salud.

Las nanopartículas generadas durante este proceso son tan pequeñas que pueden viajar a través de las vías respiratorias hasta los pulmones, el cerebro y otros órganos. De hecho, el estudio observó que la cantidad de partículas en el aire en los hogares donde se utilizaban ceras perfumadas era comparable a la producida por fuentes de combustión como los motores diésel.

Alta emisión de partículas

Las tasas de emisión de partículas fueron tan altas que superaron las de las velas tradicionales encendidas. Esta constatación podría indicar que las ceras perfumadas no son una opción tan limpia como se pensaba.

Los investigadores también realizaron pruebas en una casa de prueba equipada con ventilación mecánica para medir las concentraciones de nanopartículas en el aire. Encontraron que las ceras perfumadas, especialmente aquellas con alta concentración de terpenos como el limoneno y el linalol, inducen la formación de nanopartículas, las cuales crecen rápidamente hasta convertirse en contaminantes atmosféricos significativos.

La cantidad de nanopartículas generada fue tan alta que las tasas de nucleación de las partículas en el aire interior superaron las observadas en el ambiente exterior. Este fenómeno fue aún más pronunciado cuando la ventilación era escasa, lo que aumentaba la concentración de terpenos en el aire y, por ende, la formación de partículas.

En cuanto a la salud, el estudio alerta sobre los riesgos que representan estas nanopartículas. Aunque los investigadores señalaron que el estudio se realizó en un entorno controlado, los resultados sugieren que las personas expuestas regularmente a estas partículas, incluso en niveles bajos, podrían enfrentar problemas respiratorios y otras afecciones relacionadas.

Las partículas pueden depositarse en el tracto respiratorio superior y penetrar más profundamente, alcanzando los pulmones y, eventualmente, otros órganos como el cerebro y el hígado. Las tasas de deposición de estas partículas en los pulmones fueron comparables a las que se observan en fuentes de combustión como las estufas de gas o los motores de vehículos.

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