Trump dicta una orden ejecutiva para tomar control del gobierno local de Washington D.C.

El presidente Donald Trump firmó una orden ejecutiva el jueves con el objetivo de tomar control federal del gobierno de la capital de Estados Unidos, Washington, D.C., para que sea “lo debería ser: el orgullo de todos los estadounidenses a quienes pertenece”.

La nueva orden ejecutiva titulada “Haciendo que el Distrito de Columbia sea seguro y hermoso” crea un grupo de trabajo, conocido oficialmente como el Grupo de Trabajo D.C. Seguro y Hermoso, que estará compuesto por miembros de agencias gubernamentales clave.

El grupo de trabajo tiene entre sus prioridades aumentar la presencia policial en Washington, D.C., y “restaurar y embellecer” edificios y monumentos federales en la ciudad.

El grupo de trabajo tiene la misión de reforzar la aplicación de la ley en espacios públicos y aplicar estrictamente las leyes relativas al consumo de drogas, el vandalismo y las manifestaciones no autorizadas; maximizar la aplicación de las leyes migratorias para detener y deportar a inmigrantes que se encuentran sin permiso en el país; agilizar la tramitación de licencias de porte oculto de armas para los ciudadanos y combatir la evasión de tarifas en el metro de Washington D.C.

Entre las tareas priorizadas en la orden ejecutiva también está la de “supervisar el estatus de ciudad santuario del Distrito de Columbia y el cumplimiento de la aplicación de la ley federal de inmigración”.

La orden de Trump también autoriza la creación de un programa para restaurar y embellecer edificios, monumentos, estatuas, memoriales, parques y carreteras federales; eliminar grafitis en zonas de gran afluencia de público; y garantizar la limpieza de espacios públicos y parques.

Trump ya anteriormente apoyó los llamados a que el gobierno federal asumiera el control de Washington, D.C., alegando que el gobierno local “no estaba haciendo su trabajo” en materia de delincuencia y falta de vivienda.

En los últimos años, los republicanos han intentado revocar el autogobierno local del Distrito de Columbia, un bastión demócrata que ha tenido cierto grado de autogobierno desde 1973, pero que aún depende en gran medida del Congreso de Estados Unidos.

“Creo que deberíamos gobernar el Distrito de Columbia”, dijo Trump a los periodistas en Air Force Once, el pasado 20 de febrero.

El presidente ha criticado durante mucho tiempo las condiciones de la ciudad, por sus niveles de criminalidad y la población sin hogar.

Los legisladores republicanos presentaron nuevamente un proyecto de ley que eliminaría el gobierno local del Distrito de Columbia, incluyendo al alcalde electo y al concejo municipal. Además, permitiría al Congreso legislar para sus 700,000 habitantes, el 44% de los cuales son afroamericanos.

La creación del grupo de trabajo ocurre en un momento en que Trump y los republicanos del Congreso han examinado con mayor rigor el desempeño de la alcaldesa demócrata de Washington D.C., Muriel Bowser. El mes pasado, Trump ordenó a Bowser que despejara los campamentos de personas sin hogar cerca de edificios federales.

Bowser también retiró un mural de Black Lives Matter pintado cerca de la Casa Blanca en 2020 después de que el representante Andrew Clyde, republicano por Georgia, presentara una legislación para retener fondos federales a menos que se repintara el mural.

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