FC Barcelona logra heroica remontada para vencer al Real Madrid en la final de Copa del Rey
Barcelona y Real Madrid se enfrentaron en una final de Copa del Rey por octava vez en la historia
Jugadores del FC Barcelona celebran el 3-2 que les dio el título. Crédito: Julio Muñoz | EFE
El FC Barcelona ganó este sábado la final de la Copa del Rey 2024-25 por 3-2 ante el Real Madrid en La Cartuja, concretando una remontada épica que llevó el encuentro a la prórroga y que tuvo en Jules Koundé al héroe de la noche.
El francés logró, a falta de cuatro minutos para que concluyera el tiempo extra, el gol definitivo que le dio al Barcelona su trigésimo segundo título de campeón de la Copa. Fue el cierre perfecto a un partido vibrante, que se vivió como un verdadero clásico con polémicas desde el día previo.
En la primera mitad, el conjunto azulgrana fue muy superior. Dominó el ritmo, asfixió al Madrid y se adelantó gracias a un golazo de Pedri. Sin embargo, en la segunda parte, todo cambió.
La entrada de un tocado Kylian Mbappé revitalizó a los de Carlo Ancelotti, que consiguieron darle la vuelta al marcador, llevando el encuentro a un nivel de dramatismo que pocas veces se ha visto en una final.
Las claves de un partido de infarto
La alineación de Hansi Flick mostró algunas sorpresas. Sin Robert Lewandowski ni Alejandro Balde, y con Marc-André Ter Stegen aún en recuperación, el técnico apostó por Dani Olmo como mediapunta y Ferran Torres en la delantera. Gerard Martín ocupó el lateral izquierdo, cubriendo una baja sensible.
Del lado blanco, las bajas también se hicieron sentir. Sin Dani Carvajal ni Éder Militao, Ancelotti intentó reforzar su defensa con Ferland Mendy, pero una nueva lesión obligó a darle entrada temprana a Fran García. Desde entonces, la presión del Barça fue implacable, y solo las intervenciones de Courtois evitaron una ventaja mayor antes del descanso.
En el complemento, la historia fue distinta. Mbappé y Modric cambiaron el ritmo del Madrid. Tras el empate logrado por el delantero francés en una jugada a balón parado, Aurélien Tchouaméni puso el 2-1 con un certero cabezazo. Parecía que el trofeo viajaba a Chamartín, pero Ferran Torres igualó apenas siete minutos después, sorprendiendo a Courtois adelantado.
La emoción no terminó ahí. Un penalti pitado a favor del Barcelona en el tiempo añadido fue anulado tras revisión en el VAR, prolongando la tensión hasta la prórroga. En ese lapso, ambos equipos jugaron al límite, cuidándose de errores fatales.
Pero cuando todo apuntaba a los penales, Koundé apareció para sellar una noche histórica. Su tanto, cerca del cierre y tras un error entre Modric y Brahim, fue suficiente para que el Barcelona celebrara un título trabajado y sufrido.
Además, Ferran Torres terminó como máximo goleador del torneo con seis anotaciones, superando a Julián Álvarez y Endrick. Una muestra del crecimiento del español en un Barça que, una vez más, demuestra su capacidad de renacer en los momentos más exigentes.
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