Inmigrantes detenidos en Alligator Alcatraz denuncian vivir “enjaulados como perros” y en hacinamiento
Inmigrantes que permanecen en Alligator Alcatraz, afirman que el hacinamiento, el calor, los mosquitos y la falta de alimento, está mermando su salud
Alligator Alcatraz es considerado por los inmigrantes que permanecen detenidos allí como la antesala del infierno. Crédito: Rebecca Blackwell | AP
Tessa Petit, directora ejecutiva de la Coalición de Inmigrantes de Florida; familiares de personas privadas de su libertad en Alligator Alcatraz e incluso hasta uno de los detenidos —quien ofreció su testimonio vía telefónica—, denunciaron las indebidas condiciones a las cuales se les somete a los extranjeros carentes de estatus legal trasladados a las instalaciones montadas en los Everglades.
Durante una conferencia celebrada a las puertas de dicho centro de detención, Petit indicó que mientras los inmigrantes permanecen detenidos sufren violaciones relacionadas con sus derechos humanos.
“Las condiciones de detención son insostenibles. Hablamos de exponer a las personas a enfermedades e incluso a la muerte. Eso es una violación de los derechos humanos, sin importar si eres inmigrante. El campamento de internamiento es una atrocidad en nuestra comunidad. Moralmente es repugnante porque imita campos de concentración”, expresó.
Por su parte, Sonia Vichara, esposa de Rafael Collado —inmigrante cubano que lleva dos semanas detenido en Alligator Alcatraz— acercó su teléfono móvil a un micrófono y durante algunos segundos se escuchó la voz de su marido describiendo las malas condiciones que prevalecen en el lugar.
“Es como una jaula para perros. El acceso a las duchas es limitado y las malas condiciones sanitarias y la humedad me han provocado hongos en los pies. Cada vez que se traslada a alguien a una celda diferente lo desnudan”, indicó antes de que un guardia le dijera que su tiempo al teléfono había expirado y debía colgar.
A este testimonio se suma el de Juan Palma, otro inmigrante también de origen cubano, quien, desde el interior de Alligator Alcatraz, habló con NBC Miami.
“Siento que mi vida corre peligro. Me siento en un estado de tortura. No logro dormir debido a la gran cantidad de mosquitos que hay en la jaula montada debajo de una tienda de campaña, donde permanezco junto con otras 32 personas. Tampoco es posible distinguir la noche del día, porque las luces fluorescentes del centro siempre están encendidas. Sólo permiten ducharse cada tres o cuatro días”, aseguró.
Al respecto, Tricia McLaughlin, portavoz del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), emitió un comunicado donde niega todos los señalamientos de los inmigrantes.
“Todos los detenidos reciben alimentación adecuada, tratamiento médico y tienen la oportunidad de comunicarse con sus familiares y abogados. Garantizar la seguridad y el bienestar de las personas bajo nuestra custodia es nuestra máxima prioridad. El ICE ha trabajado diligentemente para obtener el mayor espacio de detención necesario y evitar el hacinamiento”, expresó.
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