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El truco definitivo para ahorrar al comprar un smartphone premium en 2025

Comprar un teléfono tope de gama puede representar un gasto importante pero con este truco podrás ahorrar cientos de dólares

Optar por comprar un teléfono gama alta con 1 o dos años de antiguedad puede traducirse es un ahorro que fácilmente puede llegar hasta los $500 dólares

Optar por comprar un teléfono gama alta con 1 o dos años de antiguedad puede traducirse es un ahorro que fácilmente puede llegar hasta los $500 dólares Crédito: Shutterstock

¿Buscas un teléfono inteligente potente pero no quieres pagar como si fuera nuevo? El truco definitivo es sencillo: no compres el modelo más reciente, sino uno que haya sido tope de gama el año anterior o como mucho hace dos años. ¿Por qué? Porque los teléfonos premium pierden hasta un 50–60 % de su valor en su primer año

Los Android de gama alta incluso más, con caídas del 30–40 % anuales. Eso significa que ese Galaxy S24 o iPhone 15 Pro, que costaba más de $1,000 cuando salió, hoy puede conseguirse por muchísimo menos.

Y lo mejor: ese equipo todavía tiene lo mejor en pantallas AMOLED u OLED, procesadores de primer nivel, cámaras avanzadas, buena autonomía y construcción premium. En pocas palabras, sigue siendo muy superior a casi cualquier gama media nueva.

Además, marcas como Apple, Samsung y Google ofrecen hasta 7 años de actualizaciones de software y seguridad. Eso quiere decir que incluso con un modelo de hace uno o dos años, seguirás recibiendo nuevas funciones, parches y soporte oficial por mucho tiempo.

Comprar un modelo anterior no es resignarte: es simplemente comprar de forma inteligente obteniendo la mejor relación precio valor posible.

Ahorro real sin sacrificar experiencia

Comprar un flagship de hace uno o dos años te puede ahorrar entre $400 y $600 dólares comparado con el precio original. Por ejemplo, un iPhone 15 Pro que salió en $999 puede encontrarse hoy por unos $600 o incluso menos si está reacondicionado. Lo mismo pasa con teléfonos Android como el Galaxy S23 Ultra, que bajó de más de $1,200 a alrededor de $700–750.

Por ese precio, obtienes un dispositivo con pantalla de 120 Hz, cámaras de nivel profesional, carga rápida, construcción en materiales premium y conectividad avanzada. Todo eso sigue muy por encima de los smartphones de gama media actuales, que suelen costar entre $300 y $500 dólares y muchas veces sacrifican procesador, pantalla o actualizaciones.

Además, en mercados como Amazon, eBay o tiendas de reacondicionados certificados, puedes encontrar versiones en excelente estado con garantía y envío gratuito. También hay ofertas flash durante eventos como el Black Friday o el Prime Day, donde puedes conseguir aún mejores precios.

Cómo elegir bien y qué evitar

Si vas a aplicar este truco, ten en cuenta lo siguiente:

  1. Elige flagships de hace máximo dos años: si es 2025, busca modelos como iPhone 14 Pro, 15 Pro, Galaxy S23 o S22 Ultra, Pixel 8 Pro, etc.
  2. Verifica el estado general del equipo, que esté desbloqueado y que la batería esté en buen estado.
  3. Apunta a versiones Pro, Ultra o Max, que son las que traen mejores cámaras, pantallas y batería.
  4. Asegúrate de que tenga al menos 8 GB de RAM y suficiente almacenamiento (mínimo 128 GB).
  5. Evita versiones base con poca memoria o modelos que ya estén cerca de perder soporte de actualizaciones.
  6. Si vas a comprar reacondicionado, hazlo en tiendas que ofrezcan garantía y política de devolución clara.

Este enfoque te permite obtener una experiencia de gama alta por un precio mucho más razonable. Y si eliges bien, es muy probable que ese teléfono te dure al menos otros tres o cuatro años sin problemas.

Con un poco de estrategia y paciencia, puedes tener un teléfono tope de gama por el mismo precio que pagarías por un modelo de gama media. Eso es lo más cercano a ganar en el mundo de los smartphones sin vaciar tu cuenta bancaria.

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