The Hunting Wives, el nuevo éxito de Netflix que aborda sexo, mentiras y escándalos
Esta nueva producción que llegó a la plataforma de Netflix, tiene una compilación de los géneros más atractivos para el televidente

Constantemente se suman películas, series y shows a la plataforma. Crédito: MaxShot | Shutterstock
Netflix suma a su catálogo una producción tan provocadora como intrigante. “The Hunting Wives” llega cargada de misterio, erotismo y crítica social, con Brittany Snow al frente del reparto en el papel de Sophie O’Neil, una mujer que abandona Boston junto a su esposo Graham (Evan Jonigkeit) y su pequeño hijo para instalarse en la exclusiva y ficticia Maple Brook, Texas, a las afueras de Dallas.
La entrada de los O’Neil en este selecto círculo se da en un evento político: una recaudación de fondos en la que Banks, aspirante a gobernador, pronuncia un discurso en favor de la Asociación Nacional del Rifle, defendiendo el derecho de la “gente buena” a armarse frente a los “malos que llegan en oleadas” desde la frontera. Un arranque que deja claro el tono satírico y político de la historia.
En este escenario desfilan los personajes principales: Jill (Katie Lowes), esposa del reverendo Clint (Jason Davis), líder de la megaiglesia local; su hijo Brad (George Ferrier), arrogante jugador de baloncesto con intenciones poco honorables hacia Abby (Madison Wolfe), joven de carácter vulnerable y mirada ingenua, cuya madre Starr (Chrissy Metz) tampoco aprueba el romance. A ellos se suman Callie (Jaime Ray Newman), casada con el sheriff Jonny (Branton Box), así como Monae (Joyce Glenn) y Taylor (Alexandria DeBerry), quienes completan el grupo titular de esposas.

Sexo, poder y excesos
La serie no se guarda nada a la hora de explorar su costado más audaz. Entre los momentos más llamativos se encuentra el peculiar acuerdo matrimonial entre Margo y Jed Banks (Dermot Mulroney), un magnate petrolero con aires decadentes: ambos tienen vía libre para involucrarse con otras mujeres, y lo hacen con desbordante frecuencia. La propia Margo, interpretada por Malin Akerman, protagoniza escenas íntimas con los personajes de Brittany Snow y Jaime Ray Newman, además de una polémica subtrama que la vincula con el hijo adolescente de su mejor amiga.
No sorprende que críticos describan “The Hunting Wives” como una “telenovela bisexual desquiciada en medio de la guerra cultural”. Con referencias políticas que incomodan tanto a conservadores como a progresistas —incluida una línea inspirada en Melania Trump y un debate directo sobre el aborto—, la serie apuesta por provocar sin concesiones.
De Starz a Netflix: un giro inesperado
Originalmente pensada para estrenarse en Starz, la producción fue adquirida por Netflix, lo que transformó su destino. Como reveló Brittany Snow en entrevista con Glamour, el elenco filmó creyendo que sería una serie de culto para un público reducido. El salto a la plataforma líder del streaming la expone ahora a millones de espectadores y, con ello, a un mayor escrutinio.

Un nuevo placer culposo
Si bien no pretende competir con dramas de prestigio como “Succession” o “The Crown”, “The Hunting Wives” ofrece un cóctel adictivo: misterio, sátira, excesos y un crimen por resolver. Una propuesta que no busca solemnidad, sino convertirse en el próximo “placer culposo” de la audiencia, servido con escándalos, whisky y un toque de ironía.