México pierde una de sus últimas burbujas de seguridad
El estado de Colima dejó atrás su época dorada de paz, cuando era la entidad más segura del país
MÉXICO – De la noche a la mañana aparecen en la calle cuerpos baleados y torturados metidos en sacos o dentro de las casas que antes dejaban las puertas abiertas porque nadie entraba a ellas, cuando no había matanzas por aquí y por allá ni asesinatos a vecinos, policías y funcionarios públicos.
El estado de Colima dejó atrás su época dorada de paz, cuando era la entidad más segura del país donde sólo ocurrían 50 asesinatos al año (entre 200oy 2009) y paulatinamente se convirtió en el semillero de nota roja más fructífero del país con una muerte violenta cada 11 horas.
En proporción de su número de habitantes – es el segundo estado más pequeño de México después de la Ciudad de México- hoy por hoy Colima encabeza la listas de los estados más inseguros del país con 39 asesinatos por cada 100,000 habitantes incluso por encima de Guerrero (con 29) y Sinaloa (con 17).
De acuerdo con las estadísticas reportadas por la prensa local la descomposición fue gradual desde 2010, tras el asesinato del gobernador Silverio Cabazos mientras paseaba a su perro y a quien se le acusó en su momento (extraoficialmente) de defender la presencia de la Familia Michoacana.
La Procuraduría de Justicia local incluso señaló a un sobrino del ex gobernador Fernando Moreno Peña de ser el autor intelectual del magnicidio pero el muchacho huyó hasta que fue ejecutado en enero pasado al regresar a Colima para visita familiar.
Meses después, el asesinato de otro miembro de la alta clase política puso en cuestión el papel de sus actividades. El 7 de julio, mientras conducía su automóvil por la capital colimense fue acribillado Jaime Vázquez, secretario de Desarrollo Territorial y hermano del ex gobernador Gustavo Vázquez.
Fuentes militares citadas por la prensa local atribullen la escalada de violencia a una lucha por la plaza entre las organizaciones criminales del Cártel Jalisco Nueva Generación y Cártel de Sinaloa, pricipalmente en el puerto de Manzanillo para la importación ilegal de precursores de droga sintética.
El titular de la Secretaría de Seguridad Pública estata, Eduardo Villa Valenzuela, lo reconoció de igual manera, aunque con menos precisión: “Esto es una guerra extraordinaria en la que no vemos a los homicidas entre nostros”, dijo. “Vienen de otros lados y se matan entre ellos”.
Para el analista José Antonio Ortega, del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la justicia penal el problema en Colima está relacionada, como en todo el país, en el debilitamiento institucional y el sempiterno problema de la impunidad.
“El mensaje que se manda es que se puede delinquir y no pasa nada”.
HOMICIDIOS DOLOSOS
2000- 2009 50 homicidios en promedio.
2011- 165
2012- 287
2013- 178
2014- 99
2015- 167
2016- 287 hasta julio
Fuente: Sistema Nacional de Seguridad Pública