Tormentas dejan daños severos en Houston

Las tormentas que azotaron la Ciudad Espacial el miércoles causaron que varias calles se inundaran y que más de 30,000 hogares perdieran el suministro eléctrico.

Trabajadores de CenterPoint Energy estuvieron tratando de restaurar el servicio a las áreas afectadas pero las tormentas dificultaron las reparaciones ya que los vientos y las tormentas eléctricas causaron que transformadores explotaran y que árboles cayeran sobre los cables.

Las inundaciones no fueron tan severas como las que se registraron durante las tormentas de hace unas semanas atrás pero sí lograron incomodar a los motoristas que tuvieron que buscar rutas alternativas para llegar a su destino.

Los daños más severos por las tormentas sucedieron en los condados alrededor de Houston e incluso se registraron por lo menos tres tornados. Uno de ellos tocó tierra en Pearland, donde dejó daños severos.

Center Point logró reestablecer el servicio a la mayoría de las áreas afectadas pero advirtió que es posible que algunos usuarios sigan teniendo dificultades mientras que terminan de reparar todos los daños.

Un pequeño restaurante que le pertenece a una familia de regiomontanos se salvó de los vientos destructivos de un posible tornado que, según testigos, tocó tierra dos veces en la pequeña ciudad de Pearland, a unos 40 minutos de Houston.

Los empleados de la taquería Los Brothers fueron sorprendidos por el tornado que le arrancó el techo a uno de los establecimientos que está ubicado al lado de su restaurante.

“Los vientos arrancaron el techo de uno de los negocios y lo arrastró hasta que se impactó contra una gasolinera”, dijo Irma Vásquez, empleada del restaurante Los Brothers.

Otros pequeños negocios que están ubicados sobre la carretera 35 también sufrieron daños y varios cables de electricidad cayeron al piso dejando a los vecinos del área en la oscuridad.

Unos negocios en el área quedaron intactos ya que tuvieron la fortuna de que cuando parecía que el tornado les iba a pegar directamente éste se elevó y según testigos volvió a tocar tierra unos 20 metros más al norte, donde causó los daños más severos.