El emotivo video de un ternero rechazado por su madre y adoptado por un perro

James es una vaquita bebé que ha estado luchando por sobrevivir desde el primer día, pero eso no ha disminuido su dulce espíritu.

Adam y Emily Hopson, de la granaja Happy Hens and Highlands en Carolina del Norte, encontraron a James después de que su madre diera a luz en una montaña durante un día lluvioso.

Como James era grande para un ternero, los Hopson supusieron que había sufrido daño cerebral por la depravación de oxígeno en el útero. No solo eso, sino que debido a que el cuerpo de su madre le dificultaba la lactancia, James no pudo obtener los nutrientes vitales que las vacas recién nacidas necesitaban de la leche de su madre.

Los Hopson llevaron a James a su casa para cuidarlo y a sus perros le cayeron muy bien.

Después de que los cachorros lo incluyeron como parte de la manada, James comenzó a actuar como un perro, más que como una vaca.

“Nuestros perros adoptaron a James y se hicieron cargo como si fuera una madre, le dieron amor y lo limpiaron. Su amor y aceptación le dieron la voluntad de vivir”, dice Emily.

Han pasado varios meses desde que James fue aceptado por primera vez en grupo.  Desde entonces, han tenido que superar algunos pequeños baches, como una cirugía de dos horas y media para extirparle un bulto en el ombligo. A pesar de que su corazón se detuvo durante dos minutos en el medio de la cirugía, fue reanimado y tratado con éxito.

James ya es demasiado grande para vivir en la casa, pero ahora es el líder de una manada de otros terneros huérfanos que necesitan compañeros de juego.

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“Sabíamos que pronto dejaría atrás a sus amigos perritos y necesitaríamos un compañero (son animales de manada y no están contentos sin un compañero) así que le encontramos algunos bebés huérfanos [vacas] como compañeros. Como también son huérfanos, aceptaron a James ( a pesar de que a veces usa disfraces divertidos). Se unieron de inmediato “.