Fraude con visas de estudiantes en escuelas tecnológicas de L.A.: 15 meses de prisión para el dueño
Se emitieron documentos a inmigrantes que nunca asistían a clase e incluso vivían fuera del estado
Usaba sus locales como fachada para que cientos de inmigrantes obtuvieran de forma fraudulenta visas de estudiantes extranjeros. Y hoy ha sido sentenciado a 15 meses de prisión y al pago de medio millón de dólares por ello. Es Hee Sun Shim, el dueño de cuatro escuelas tecnológicas de Los Ángeles.
Conocido como Leo Shim, él se había declarado culpable el año pasado de armar, junto con otros dos acusados, un esquema de fraude conocido como “pay to stay” (pague por quedarse), por el que se emitieron documentos a inmigrantes que nunca asistieron a clase e incluso vivían fuera del estado.
“Este fraude permite a los ciudadanos extranjeros eludir los controles de inmigración, entrar, y permanecer en Estados Unidos ilegalmente, lo que compromete la seguridad nacional y el estricto conjunto de reglas que siguen los inmigrantes legítimos”, dijo la fiscal federal Eileen Decker, que buscó inicialmente 15 años de cárcel para el acusado (pero la defensa alegó que quienes incumplieron las reglas fueron los estudiantes).
Los locales utilizados en esta operación durante casi seis años, de acuerdo a documentos de la corte, fueron el Colegio Americano de Estudios Forenses (ACFS), Likie Fashion and Technology College, Prodee University/Neo-America Language School y el Instituto Walter Jay M.D.
Como parte del fraude, Shim, de 54 años, que reside en Beverly Hills y cumplirá la sentencia en una prisión federal, emitió certificados a los inmigrantes que los acreditaban como estudiantes de alguna de las cuatro escuelas, ubicadas en el Condado de Los Angeles. A cambio, ellos debían pagar los cargos de matricula y permanecer inscritos en las escuela aunque no asistieran a clases.
La investigación comenzó en 2011 cuando un grupo de agentes de la división de Estudiantes y Programas de Intercambio del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) realizó una visita sin anunciar al campus principal de la escuela Prodee y encontró a tan sólo 3 estudiante tomando la clase de inglés, a pesar de que los registros indicaban más de 900 alumnos inscritos. Además, los inmigrantes que habían ingresado al país con la Visa F1 para asistir a otras escuelas fueron transferidos a estas escuelas de forma fraudulenta.
La condena llega en medio de una serie de medidas de la Administración Trump para endurecer las políticas migratorias.