Los Ángeles es el condado más difícil de contar de EEUU 

Con más de 10 millones de residentes, la oficina del Censo considera a Los Ángeles como el condado más difícil de contar de la nación debido a su gran diversidad, extenso número de idiomas y el gran número de inquilinos que viven en el condado.

Datos de la oficina de la supervisora Hilda Solís indican que, en la ciudad de Los Ángeles, la ciudad más poblada del condado, los residentes hablan más de 200 idiomas y más del 70 por ciento son inquilinos y no propietarios de casa.

Para garantizar que los individuos y las familias que no hablan inglés se incluyan en el proceso decenal, La Junta de Supervisores aprobó ayer una moción, redactada por Solís y la supervisora Janice Hahn, para proclamar el 1 de abril como el ‘Día del llamado a la acción del Censo’.  El objetivo es aumentar el conocimiento de la necesidad de contar a cada residente el próximo año.

“En nuestra llamada a la acción del censo del 1 de abril, la supervisora Janice Hahn y el alcalde Eric Garcetti se unirán al movimiento, junto con los residentes de todo el condado, para reiterar lo que está en juego si es que no contamos las poblaciones difíciles de contar”, dijo Solís.

“Estamos a punto de perder alrededor de $2,000 por cada persona que no contemos. Si un millón de personas no son contadas, podríamos perder $20 mil millones en el transcurso de una década. Los proyectos de autopistas podrían ponerse en peligro, los programas de desarrollo de la fuerza laboral podrían verse afectados y los programas escolares podrían recortarse.

“Un conteo preciso del censo no solo es fundamental para la democracia representativa, sino que garantiza que las escuelas y las comunidades de todo el condado de Los Ángeles reciban una parte justa de los fondos federales”, continuó Solís. “El condado de Los Ángeles asumirá el reto de asegurarse de que cada residente del condado participe en el Censo 2020. Recuerden, ¡todos cuentan!

“El Censo 2020 está a solo un año y hay mucho en juego”, dijo Janice Hahn. “Todos los residentes del condado que no se cuenten, costarán miles de dólares en fondos federales, muy necesarios para que podamos arreglar nuestras carreteras, mejorar nuestros hospitales y mucho más. Depende de todos nosotros correr la voz. El censo se acerca y es fundamental participar, independientemente de su estado migratorio”.

El alcalde Eric Garcetti respaldó las declaraciones de sus colegas y enfatizó que no se permitirá que nada se interponga en un conteo preciso. “Seguiremos trabajando para asegurarnos de que todos los angelinos estén listos para responder al cuestionario”.

El Censo 2020 será en un año a partir del 1 de abril de 2019, fecha en que el condado de Los Ángeles hace un llamado a la acción. El censo decenal es obligatorio por la Constitución de los Estados Unidos y se utiliza para determinar la representación política y para asignar cientos de miles de millones de dólares en fondos federales a estados y jurisdicciones locales.

Un mal conteo del proceso cívico podría traducirse en menos fondos económicos para proyectos de infraestructura de transporte, desarrollo económico y programas que ayuden a nuestros residentes más vulnerables.