Conoce los 10 alimentos con exceso de sal que estás ignorando en la dieta de tu familia
Aunque no lo creas, hasta los pastelillos dulces contienen mucha sal

Cuida el consumo de sal contenido en tu dieta diaria. Crédito: Aurelia Ventura | Impremedia/La Opinión
Comer es delicioso, pero igualmente peligroso para nuestra salud si no tomamos las medidas adecuadas en el consumo. Y como sabemos que a diario te preocupas por la alimentación de tu familia, hoy te vamos a recomendar el cuidado en la ingesta de sal oculta en alimentos muy cotidianos.
Existe una gran relación entre el exceso de sal en la dieta y algunos problemas a la salud, como la diabetes tipo 2, la obesidad, la retención de líquidos, problemas cardiovasculares y del tipo renal.
Y es que si piensas que consumir sal solo tiene que ver con la cantidad que sirves con tu salero, estás en un error, por eso aquí te compartimos los 10 alimentos de la dieta familiar que contienen mucha sal y tal vez no lo sabías.
Pan. Expertos opinan que cada pieza contiene unos dos gramos de sal por cada 100 gramos de pan, que más o menos es el peso de un bolillo estándar.
Queso. Hablamos en específico de los manchegos o los que se funden. Son deliciosos, sí, pero su problema radica en que al formar el queso por fermentación más evaporación y desuerado, se concentra mucho el cloruro sódico.
Embutidos. El jamón, las salchichas, todos los embutidos contienen mucha sal y si no cuidas su consumo terminarás pagando la factura.
Carne fresca. Un buen trozo de carne ya contiene el sodio de su músculo, pero al momento de cocinarlo se le agrega más sal de mesa y esto nos da un resultado de porcentajes nada recomendados a la salud.
Salsas. Hablamos de las del tipo industrial como la catsup, la mayonesa, la mostaza. Imagínate la cantidad de sal que consumes cuando comes un hotdog. Mejor consúmelo con bastante moderación.
Sopas y cremas envasadas. Estos alimentos suponen un aporte de sal de como mínimo un gramo por cada 100 de producto.
Aperitivos. Ya sean los saludables, como almendras saladas, cacahuates, o los chatarra, como papas o fritos en general, son fuentes enormes de sal a tu dieta diaria.
Platillos preparados. Las comidas rápidas llevan toda cantidad de ingredientes que aumentan el sabor pero también la cantidad de sodio en su contenido nutricional.
Conservas. Sin duda la sal es un componente indispensable en la mayor parte de las conservas envasadas que encontramos en el supermercado.
Pastelería. Aunque dulces al paladar, la bollería también contiene sal procedente de la masa que, a veces, cuando es producto industrial, lleva cantidades exageradas. Evítalos por tu propio bien y el de tu familia.