Desempleo y repunte del virus: Por qué un segundo estímulo económico es necesario
El secretario del Tesoro reconoció que la economía estadounidense necesita un nuevo impulso
La posibilidad de una segunda ronda de estímulo económico volvió este jueves con fuerza al debate público después de que el secretario del Tesoro, Steve Mnuchin reconociera que la economía estadounidense necesita un nuevo impulso. Aunque Mnuchin dio a entender que el nuevo plan estaría enfocado a los negocios y la vuelta al trabajo, lo cierto es que tanto el desempleo como el número de contagios por coronavirus siguen aumentando en Estados Unidos.
El presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, dijo este miércoles que puede que millones de personas no vuelvan a sus antiguos trabajos y que podría tomarles tiempo volver a conseguir empleo. Un día después de esta declaración, el Departamento de Trabajo informó que 1.54 millones de trabajadores engrosaron la lista del desempleo en la semana que acabó el 6 de junio.
Aunque perdieron el trabajo menos personas que la semana anterior, el hecho de que el jefe del banco central estadounidense haga una declaración tan pesimista debería hacer saltar las alarmas de los responsables políticos para poner en marcha más apoyos para los desempleados, según apunta Forbes. Los $600 dólares semanales que el Gobierno está enviando a quienes se hayan visto en esta situación durante la pandemia dejarán de llegar el próximo mes y no hay un proyecto sólido para extender el programa.
Por otro lado, los casos de coronavirus han empezado a aumentar a medida que los estados han reanudado su actividad económica, especialmente en Texas, Florida y California. Esto se suma a las protestas multitudinarias que han recorrido el país tras la muerte de George Floyd. Anthony Fauci, el mayor experto de la Casa Blanca en enfermedades infecciosas, advirtió esta semana que la “pesadilla” del coronavirus “aún no ha terminado”.
Los contagios en el país superaron este miércoles los dos millones y casi 114,000 personas han muerto ya como consecuencia de COVID-19, según el conteo de la Universidad Johns Hopkins. Las cifras continúan al alza en 22 estados mientras que otros 20 han visto disminuir el número de casos. Pero incluso Nueva York, que llegó a ser el epicentro mundial de la pandemia, empezó esta semana su camino de vuelta hacia la apertura.
Donald Trump ya había pedido mucho antes reanudar la economía del país y arremetió con dureza contra los gobierno estatales que optaron por seguir las recomendaciones sanitarias. Sin embargo, la presión del presidente alentó las protestas contra autoridades estatales y locales y los desafíos a las normas impuestas.
No parece improbable que, ante una nueva oleada de casos, se vuelva a las restricciones. Ya Wall Street hizo este jueves su interpretación con el peor desplome de su principal indicador (Dow Jones) desde que empezó la crisis. Una caída que cristaliza el miedo de los mercados a un repunte de la crisis sanitaria.