Biden reconoce que la frontera vive una crisis, pero aumentará el número de refugiados
El mandatario dijo que su administración "no podía hacer dos cosas a la vez", en referencia al incremento de llegadas de niños no acompañados
El presidente Joe Biden reconoció que su gobierno enfrenta una crisis en la frontera, en medio de la presión de activistas que lo obligaron a aumentar el número de refugiados que el país recibirá.
“Vamos a aumentar el número (de refugiados)”, dijo el presidente Biden cuya administración limitó a 15,000 ese número de inmigrantes, el cual fue impuesto por el gobierno del presidente Donald Trump.
El presidente Biden dijo que su gobierno “no podía hace dos cosas a la vez”, en referencia a los esfuerzos para atender la llegada de niños no acompañados y de inmigrantes indocumentados adultos a la frontera, algo que había calificado como una “emergencia”, pero ahora reconoce como una crisis.
“El problema fue que el asunto de los refugiados forma parte de lo que se estaba trabajando sobre la crisis que derivó en la frontera con los jóvenes”, dijo. “No podíamos hacer dos cosas a la vez, así que ahora vamos a aumentar el número”.
Durante su campaña, el presidente Biden prometió un incremento significativo, arriba de 60,000, el número de refugiados que aceptaría EE.UU. Los defensores de personas desplazadas a nivel mundial por la guerra, principalmente, exigen que cumpla su promesa.
La Coalición Interreligiosa de Inmigración, que integra a más de 600 líderes de grupos que atienden a refugiados, calificó de “inaceptable” la decisión original del presidente Biden.
Agregaron que el compromiso del presidente fue aumentar a 62,500 para el año fiscal 2021 el número de refugiados y se comprometió a reasentar a 125,000 refugiados en el año fiscal 2022.
“El presidente Biden fue elegido con su promesa de Reconstruir Mejor, para restaurar la humanidad en la forma en que trabaja nuestro gobierno”, dijo Elissa Díaz, Gerente de Políticas y Defensa de Church World Service y co-presidenta de la coalición. “Hacemos un llamado a la administración para que escuche a las comunidades en los Estados Unidos… las mismas comunidades que ayudaron a elegir a la administración actual, y revise la meta de admisiones a 62,500, así como para reasentar a 125,000 refugiados el próximo año”.
El rabino Jonah Dov Pesner, director del Centro de Acción Religiosa del Judaísmo Reformado, calificó como “un daño irreparable” la limitante.
“Rechazamos las políticas que excluyen a los refugiados de nuestras fronteras”, dijo. “El daño que esta decisión causará a los refugiados que han esperado durante mucho tiempo el reasentamiento en los Estados Unidos es irreparable”.
Decisión bajo presión
Tras la presiones, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo que el 15 de mayo, el presidente Biden establecerá una nueva cifra sobre el número de refugiados, un programa que es diferente al programa de asilo, debido a las aplicaciones de los primeros son revisadas desde el extranjero antes de autorizar su viaje al país.
El presidente Biden enfrenta críticas de republicanos y grupos conservadores sobre inmigración, debido al incremento de llegadas a la frontera, que de febrero a marzo aumentó 100 por ciento en el caso de niños no acompañados, mientras se reportó un alza de 71% en cuanto a adultos.
La oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) dijo que el 60% de las personas que llegaron a la frontera el último ya fueron deportadas y otras estaban e proceso. El 29% es gente que había sido expulsada previamente.