Texas eliminará los beneficios federales de emergencia por desempleo a partir del 26 de junio
El gobernador texano, Greg Abbott, seguirá los pasos de otros de sus compañeros republicanos para suprimir los pagos de desempleo federales que equivalen a $300 dólares semanales para los beneficiados
Poco a poco los estados gobernados por los republicanos están suprimiendo los beneficios federales de emergencia por desempleo que otorgan $300 dólares a quienes son beneficiarios. La semana pasada Alabama, Carolina del Sur, Montana, Arizona, entre otros anunciaron la medida.
Hace unas horas tocó el turno a Texas, cuando el gobernador Greg Abbott dijo el estado eliminaría los beneficios federales a partir del 26 de junio. El mandatario local externó públicamente que el repunte de la economía estatal hace que los empleadores tengan puestos vacantes que deben ser llenados.
Aunado a esto, Abbott señaló que la cantidad de puestos vacantes en Texas está a la par con la cantidad de personas que reciben beneficios, por lo que ya no sería necesario contar con los apoyos extras que se están dando por parte del gobierno federal.
De acuerdo con el Departamento de trabajo de Estados Unidos, en sus últimos informes, Texas tiene una tasa de desempleo de 6.9%, representando la más alta que el promedio nacional que equivale a de 6.1%. Con base en los números oficiales esto pone en serios apuros a quienes no tienen empleo.
La decisión tomada por los gobernadores y legisladores republicanos tiene que ver con el bajo número de empleos creados en abril. Por ello, han argumentado que los beneficios por desempleo están desincentivando a los desempleados para que no vuelvan al trabajo y vaya al alza la escasez de la mano de obra en el país.
En promedio, el beneficio de desempleo en los estados representa $330 dólares a la semana, con el complemento federal, los beneficiados reciben $630. Esto en un mes equivale una erogación para el gobierno de $2,520 dólares y al año implica $30,240 al año.
Con base en dichos parámetros, los republicanos han planteado que dichas cifras han evitado que los estadounidenses busquen empleo, ya que según ellos estos beneficios, representan más dinero de lo que un trabajador con el salario mínimo pueden ganar.
Tras lo ocurrido, se espera que en breve, todos los estados republicanos vayan adoptando estas medidas, las cuales son posibles por tener autonomía en algunas decisiones, donde el gobierno de Joe Biden no tiene injerencia alguna.
En este sentido, los gobernadores tienen la última palabra para decidir si acepta ayudas federales o no. Es así que, en este caso, pueden suprimir los apoyos al desempleo sin problema alguno.
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