Cómo un preso “satanista” hispano decapitó a compañero de celda en California sin que guardias se dieran cuenta
Revelan contenido de dos reportes sobre homicidio; la familia de la víctima acusa fallas de los vigilantes, pero éstos señalan que los compañeros de celda estaban vivos cuando ocurrió la revisión rutinaria
Los guardias de una prisión de California alegan que no se dieron cuenta de que un preso que se considera “satanista” torturó y decapitó a su compañero de celda en la prisión de Corcoran, en California.
Los hechos ocurrieron el 9 de marzo de 2019, pero la familia de la víctima presentó una demanda y nuevos reportes emergen sobre el caso, señaló el L.A. Times.
Los agentes se dieron cuenta del crimen varias horas después de que Luis Romero fuera asesinado por Joshua Osuna, según dos informes de la oficina general del inspector estatal.
Osuna está acusado de utilizar un arma punzocortante hechiza para decapitar y desmembrar a Romero, quitándole un ojo, un dedo y una parte de su pulmón.
Romero fue enviado a una celda con Osuna, de 31 años, a su llegada de la prisión estatal de Mule Creek, según la demanda, luego de ser declarado culpable de asesinato en segundo grado por disparar fatalmente a una mujer en Compton cuando era un adolescente.
Osuna cumplía una cadena perpetua por el asesinato y tortura de Yvette Peña, de 37 años, pero incluso cuando estaba en juicio el sujeto se burló de la familia de la víctima, señala el Times.
Los reportes sobre el asesinato en la prisión no explican por qué los oficiales no lograron descubrir la escena del crimen, pero la familia de Romero alegó que había una sábana colocada sobre las rejas de la celda, lo que impidió ver hacia dentro.
“El asesinato ha provocado investigaciones y una demanda sobre por qué Romero estaba en una celda con Osuna”, indica el reporte periodístico. “Uno de los informes también culpa al Departamento de Correcciones y Rehabilitación de California por realizar una investigación de mala calidad y retrasar la acción disciplinaria contra los guardias“.
El fiscal de distrito del condado de Kings acusó a Osuna de asesinato por la muerte de Romero, pero un juez ha dictaminado que no es competente para ser juzgado.
Osuna fue trasladado al programa de internación psiquiátrica de la prisión estatal de Salinas Valley, donde se le diagnostica un espectro de esquizofrenia.