Yin-Yang: significado de cada lado y formas de aplicarlo a diario para equilibrar tu vida

El Ying y el Yang es un símbolo bastante popular en accesorios, amuletos, ropa o tatuajes, sin embargo, pocos conocen lo que en realidad significa. Se trata de un concepto que, de manera general, representa equilibrio, dualidad y que todas las cosas coexisten como opuestos inseparables, por ejemplo, hombre y mujer o luz y oscuridad. Por eso, se le ilustra con una línea curva que marca los límites entre el blanco y el negro, ninguno superior al otro, y el aumento de uno trae en consecuencia la disminución del otro.

Su origen data del Siglo III a.C., aproximadamente, y fue estudiado en escuelas filosóficas y astrológicas de la antigua China, según reseña el sitio WorldHistory.org. El Yin-Yang fundamenta que el universo se creó a sí mismo a partir de la energía caótica y la transmutó en orden, de esta manera, el símbolo que todos conocemos representa la teoría de la creación. Este principio activo que dio origen a la vida se le conoce como “chi”.

Simbolismo del Yin

El Yin es la parte negra del símbolo y representa la energía de la Tierra, ligada a la Luna, oscuridad, los océanos y las sombras. Se le asocia a la feminidad y alcanza su máximo nivel de influencia en el solsticio de invierno. Los temas del Yin son:

Feminidad
Oscuridad
Norte
Agua
La energía pasiva
Luna
Tierra
Frío
Vejez
Números pares
Suave
Pobre
El espíritu

Simbolismo del Yang

La parte blanca del símbolo representa al Sol, lo que es ligero, expansivo y está asociado a la energía masculina. Alcanza su mayor influencia en el solsticio de verano. Los temas del Yang son:

Masculinidad
Blanco
Luz
Sur
Fuego
Sol
Cielo
Cálido
Juventud
Números impares
Montañas
Rico
Duro
La forma de las cosas

El Yin-Yang en la vida cotidiana

Para el Yin y el Yang la clave de la prosperidad es el equilibrio. Mientras las fuerzas convivan en armonía es posible tener bienestar en todos los niveles. De acuerdo con Harmonia.la, este concepto es usado en la medicina tradicional china, donde se dice que cada órgano tiene su propio Yin-Yang. Así, lo podemos usar para restablecer el equilibrio en la salud.

Por ejemplo, en la ajetreada vida que llevamos es bueno tener descansos. Estar todo el tiempo ocupados carga nuestra energía hacia el Yang y puede ocasionar un desequilibrio en nuestro reloj biológico, ritmo cardiaco y podemos ser más susceptibles a enfermedades. Si nos mantenemos todo el tiempo pasivos, sin hacer nada, la energía se cargará hacia el otro lado (Yin) tampoco habrá armonía.

De igual manera, el ejercicio es bueno para la salud, pero si sacrificamos el sueño, el descanso, el tiempo de ocio o no hacemos el que es adecuado para nosotros, también genera un desajuste. Lo mismo en la comida, el sueño, el trabajo y en todas las actividades de la vida diaria. La clave es equilibrar el todo.

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