Ni fácil ni rápido: Nicaragua pide salir de la OEA pero hay un proceso a seguir
El gobierno de Nicaragua en voz del canciller Denis Moncada anunció su salida de la Organización de Estados Americanos (OEA) un organismo hemisférico que aglutina a 34 países de la región, por “sus reiteradas acciones injerencistas”
El viernes, el gobierno de Nicaragua en voz del canciller Denis Moncada anunció su salida de la Organización de Estados Americanos (OEA) un organismo hemisférico que aglutina a 34 países de la región, por “sus reiteradas acciones injerencistas”.
Ocurre después de las elecciones en que se presumió el triunfo del presidente Daniel Ortega para seguir en el cargo, un proceso que ha sido cuestionado por la OEA.
La Asamblea General aprobó una resolución con la que declara que las mismas “no fueron libres, justas o transparentes, y carecen de legitimidad democrática”.
Las reglas del organismo dicen que es posible que cualquier país miembro se desligue de él, y para ello es necesario presentar una denuncia escrita a la Secretaría General de la OEA, como dicta el artículo 143 de la Carta de la misma.
Una carta
Moncada dijo que ya envió la “comunicación oficial” a Luis Almagro, secretario General de la OEA.
Cuando se recibe el aviso oficial, el artículo en cuestión indica que la Secretaría General debe informar al resto de los países de la denuncia.
Quedar desligado de la organización toma dos años a partir de que llega la notificación, aunque el artículo indica que el Estado miembro será retirado “después de haber cumplido con las obligaciones emanadas de la presente Carta”. Se trata de cuotas de membresía a la organización.
El departamento jurídico de la Secretaría General debe analizar las justificaciones y motivos de Nicaragua para buscar su salida de la OEA. “Todo eso tiene que ponerse en revisión, porque salirse de la OEA implica renunciar a una serie de acuerdos internacionales”, cita The Associated Press a Manuel Orozco, de la organización Inter-American Dialogue.
Como los países miembros, Nicaragua se ha sumado a acuerdos, comisiones y trabajo en general relacionados con la OEA, todo lo cual será resuelto por el departamento jurídico, que emitirá una serie de recomendaciones a Nicaragua para desligarse.
¿Qué significa?
Salir de la OEA, de acuerdo con el experto, impacta negativamente su reputación internacional, y tiene una implicación económica. La primera, porque “Nicaragua sepultó su credibilidad totalmente con ese anuncio”. En el tema económico, se podría traducir en menos préstamos de entidades internacionales.
“Implicaría que la comunidad internacional va a repensar el apoyo a un régimen dictatorial en términos de financiamiento externo. Entonces, eso tiene implicaciones en la relación con el Fondo Monetario, con el Banco Mundial, con el Banco Centroamericano de Integración Económica”.
Manuel Orozco.
Los casos de Cuba y Venezuela
Nicolás Maduro reiteradamente ha acusado a Luis Almagro de abusar de su autoridad para respaldar a la oposición, y anunció su salida del organismo en 2017. Celebró la formalización de la misma dos años después, en 2019, aunque entonces la OEA reconocía como representante del país sudamericano a Gustavo Tarre, aliado de Juan Guaidó.
En cuanto a Cuba, la OEA le considera un estado miembro no activo, pues se le expulsó de la organización en 1962 por adherirse al bloque comunista soviético, pero la decisión se anuló en 2009, aunque Cuba no ha solicitado que se le reincorpore.
Con información de The Associated Press.
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